29 julio, 2021
Para los que tienen algunos años de ver la misma ‘serie’ electoral provinciana cada dos o cuatro años, es increíble la repetición de recursos que ‘garpan’ en las definiciones internas y que reeditan a los mismos actores, a los que se le va cayendo el pelo, pero no la maña.
De hecho, la lista de «unidad» tan festejada por el sector más ortodoxo del Frente de Todos, es acusada por buena parte de la militancia de haber cerrado otra vez las candidaturas entre ‘gallos y mediatarde’, a propósito de la alejada reunión donde se cocinó la cosa: en una chacra privada del Valle, a donde sólo podían ingresar los invitados especiales, léase los peronistas de paladar negro provincianos.
La síntesis de todo esto la blanqueó al filo de la definición el compañero «Cone» Díaz quien denunció por los medios que había ‘falta de acceso a la información’ y secretismo evidente para los afiliados al partido peronista chubutense, que el nucleo duro y la presidencia del partido mantenía cerrados los locales partidarios y que consideraba que era ‘una estrategia de las autoridades del PJ’ para “sacar de la cancha a las listas”, arremetiendo de lleno contra la figura de Carlos Linares: “Ha fracasado en la unidad”, sentenció. Y no se equivocaba.
Afuera quedaron muchos heridos que se animaron a jugar de alguna manera para democratizar la definición en el histórico sello de Juan Domingo y Evita coptado hace tiempo por otras ‘ismos’.
El cierre de alianzas y presentación de listas así lo evidenció. A la «unidad» proclamada desde el linarismo se le animaron 8 grupos diferentes dentro del PJ, de los cuáles sólo 6 pudieron presentar y cumplimentar listas. Sin embargo, el grupo monopólico ayudó a bajar 4 apelando a que «la mecánica establecida es que los Partidos o Frentes electorales tienen una Junta Electoral y ante esa Junta se presentan los que quieren armar una Lista”, y al parecer le encontraron «defectos» internos.
O sea si los compañeros creían que esto del populismo interno era democrático, se olvidan de las generalísimas de la ley y ‘que parezca un accidente’. Si hasta ahí llegaron las seis listas que habían quedado en pie, no se percataron que entrarían en juego ‘las fuerzas de choque’ con el histórico apoderado del PJ, Blas Meza Evans, un experto en artilugios y resquicios de forma.
Hecho el ‘trabajo’ y bajadas otras 4 listas (de las 6 que quedaban en pie, de las 8 que se les animaron…), como corresponde al yihadismo político, alguien salió a adjudicarse el ‘atentado’. Desde un libelo editorial del Valle , Blas Meza Evans se refirió a la situación política del PJ de cara a las próximas elecciones legislativas. “Cualquier apoderado de Lista que considere que se ha errado en el criterio de la Junta acerca de los incumplimientos puede presentar un recurso, y apelar a la Justicia Federal”, sentenció.
De acuerdo a su versión, a la lista de Mujeres Justicialistas «la Junta le oficializó la Lista de candidatos a Senadores y Diputados, no así las Listas de Concejo de Magistratura para Trelew y Esquel porque no cumplían con el requisito de no incorporar más de un 25% de extrapartidarios”. Con esto quedaría en pie un grupo que en definitiva consideran que no le hará mucha fuerza en las PASO al linarismo, y que por el contrario si puede debilitar el voto de otros partidos.
A su vez describió el apoderado de los apoderamientos que “El Movimiento de Integración Chubutense presentó Senadores, Diputados, Concejo de la Magistratura y en la comuna de Aldea Beleiro. Oficializó Senadores, Diputados y Concejo pero no la lista de Presidente y vice de Aldea Beleiro”, indicó. Este sector sería otro de esos ‘males necesarios’ para posteriores negociaciones internas, considerarían algunos de los ortodoxos.
Como para naturalizar el detalle se apeló a una coincidencia, resaltando que “lamentablemente el Frente de Todos no lleva candidatos a Aldea Beleiro ni Atilio Viglione. Faltó trabajo para llegar, se dedicó todo el esfuerzo a Diputados y Senadores y no se ocuparon mucho el tema de las aldeas rurales”.
Como broche definitorio intimó a que “Ahora se abre una etapa recursiva. Cualquier apoderado de Lista que considere que se ha errado en el criterio de la Junta acerca de los incumplimientos puede presentar un recurso ante la misma Junta para que revise su decisión y puede apelar a la Justicia Federal”, concluyó el abogado, con lo que se infiere que si las otras dos listas quieren realmente pelearla no les será fácil en términos de papeles y resquicios, y para las que pasan la prueba, si es que no están las cuitas ya arregladas, vendrá seguramente la etapa de negociación final donde tallarán en la campaña los recursos y aparatos absolutamente dispares con los que cuenta los participantes de las PASO por el peronismo.
Sin dudas una purga que desanima cada vez más a participar de la vida interna del partido. Un fenómeno de rosca extrema, que no es exclusiva del PJ, pero sobre la que los ‘compañeros’ sin dudas tienen varios master obtenidos. En fin…
