20 enero, 2021
PESE A LA DEUDA SALARIAL DE ARRASTRE Y A LA DOSIFICACIÓN DEL DIÁLOGO, ARCIONI BUSCA COMENZAR LAS CLASES EN MARZO
El grueso de las voces interesadas afirma que parece difícil o casi imposible que en marzo comiencen las clases en Chubut. En la Provincia, el problema no es tanto el resguardo por la pandemia (aunque también) como el tremendo cortocircuito político entre el oficialismo y el sector que se lleva en promedio, el grueso de masa salarial de la administración pública. Un entrevero que arrastra tres años largos con el consiguiente deterioro del sistema educativo chubutense y perjuicio para los educandos, de una gravedad sin precedentes en todo el país.
Mientras el debate minero ahoga los reclamos salariales en el tránsito de un verano que ayuda a dispersar los reclamos en Rawson, la ministra de Educación de la Provincia, Florencia Perata, anticipó días pasados que el Gobierno estará recibiendo a los dirigentes gremiales docentes en la mesa de negociación paritaria, según lo solicitaron.
Ayer, varios de los dirigentes provinciales confirmaron mediáticamente que efectivamente habían recibido la cita para este jueves.
El Gobierno lo que quiere es hablar de la vuelta a las aulas, en principio con una propuesta de la mitad de los alumnos de forma presencial y la otra mitad desde las casas, aunque todo esto dependerá de la situación epidemiológica que se dé en aquel momento. Esa será la intentona de máxima, aunque de mínima lo que se buscará por lo menos es tocar el tema y lograr la foto con los gremios para mostrar a nivel nacional que el esfuerzo que reclaman desde la Rosada, oficialmente se hizo. Después si no se concreta, será seguramente cuestión gremial.
Desde la conducción de Atech habían reclamado ser convocados por el Gobierno para definir varias cuestiones de cara al inicio del ciclo lectivo 2021. «Hay que tener garantías de infraestructura, de salario, de conectividad y eso no es algo que sea de resorte específico de los trabajadores», había señalado Santiago Goodman, secretario general de la Atech.
El gremio pidió que se los convoque a una comisión «negociadora» porque también resta definir el protocolo sanitario en las escuelas ante la pandemia de coronavirus. Por todo ello, persisten las dudas de un normal inicio de clases en Chubut, más allá de lo que pueda ser la metodología semipresencial.
Casi anticipándose a un debate que seguramente será de ‘sordos’ por la cantidad de temas condicionantes que hay en el medio, un día antes el Gobierno estableció un protocolo que presentará a los gremios docentes de la provincia, y donde estableció que las familias podrán optar por continuar con los estudios en forma no presencial hasta que la situación por el Covid culmine.
Eso por supuesto si hay clases, con lo que políticamente pone la pelota en la cancha del tercero en discordia, y en jaque a los propios docentes.
Este novedodso protocolo prevé la implementación de cuatro etapas, y además establece que “el regreso a clases presenciales no será obligatorio para cuyas familias decidan no enviarlos, sea por prescripción médica o decisión –estrictamente- familiar”.
En estos casos, los alumnos podrán continuar sus estudios en forma no presencial hasta que la situación epidemiológica actual por Covid 19 culmine definitivamente.
O sea que en una situación u otra los padres confrontarán con quienes no accedan a dar clases por retención de servicios bajo algún tipo de reclamo, o conflicto laboral por falta de pago.
Los lineamientos tendrán aplicación en los establecimientos públicos y escuelas públicas de Gestión Privada de todos los niveles y modalidades de la Educación Obligatoria, y de los Institutos Superiores, Municipales y Provinciales.
Bajo la consigna de darles a conocer estas novedades se produjo la cita para este jueves. En ese marco, la convocatoria alcanzó a los secretarios generales de la Asociación de Trabajadores de la Educación del Chubut (ATECh); del Sindicato de Trabajadores de la Educación (Sitraed); del Sindicato de Docentes Privados (Sadop); de la Asociación de Magisterio de la Enseñanza Técnica (AMET); y de la Unión de Docentes Argentinos (UDA), ATE, SOYEAP y UPCN.
Desde el Gobierno también aclararon que en una primera etapa, el Consejo Asesor evaluará los aspectos sanitarios, es decir si están dadas o no las condiciones para el regreso a clases según las indicaciones del Ministerio de Salud; el aspecto pedagógico, referido al “tránsito progresivo a la presencialidad” según grupos etarios y niveles educativos que podrán comenzar a asistir a los establecimientos; y el aspecto de la infraestructura escolar, referido al acondicionamiento necesario con respecto a la infraestructura básica, como la sanitaria básica y esencial para la reapertura.
La segunda etapa contempla un trabajo de sensibilización masiva intra e interministerial y hacia las comunidades de toda la provincia, estableciendo un trabajo articulado entre todos los niveles educativos, para fomentar un mensaje consensuado orientado al proceso de reapertura, a través del análisis el conocimiento del protocolo jurisdiccional.
A tal fin, se prevén encuentros con todo el personal docente y auxiliar con los equipos directivos para la implementación del protocolo, además de capacitaciones y ejercicios para toda la comunidad educativa acerca de los procesos de adaptación a la “nueva realidad”.
Asimismo, la tercera etapa apunta a desarrollar campañas de comunicación dirigidas a estudiantes, familias, docentes y personal auxiliar sobre síntomas a monitorear y todas las medidas sanitarias fundamentales para evitar contagios de Covid 19, además de los protocolos con respecto al uso de los espacios comunes, los tiempos pedagógicos y modificaciones de los hábitos y rutinas escolares.
Finalmente, una vez que todos los establecimientos den cumplimiento a las etapas previas, los Supervisores Técnicos Escolares de cada nivel y modalidad evaluarán los formatos pedagógicos, de organización institucional y de gestión directiva. En el caso de las Escuelas de Gestión privada, serán visados por la Dirección de Educación Privada.
Asimismo, dentro de la política dispuesta por el arcionismo, se podrán realizar grupos de no más de 7 alumnos de nivel inicial y 15 en los niveles primario, secundario y de educación superior; y en todos los casos se deberá respetar el distanciamiento de 1,5 metros entre estudiantes y alumnos, disminuyendo la cantidad de alumnos por grupos si los espacios áulicos no permitieran mantener esa distancia.
Además, se deberán implementar jornadas escolares con reducción de horarios para la atención de los grupos de presencialidad con tiempos intermedios para garantizar la higiene, y alternancia en los tiempos de los grupos entre asistencia a la escuela y el trabajo pedagógico en la no presencialidad.
*DGPCH, ADNS, LU20 RCH
