Casi 700 millones de dólares pagó hasta el momento el Gobierno a ocho proveedores de vacunas contra el coronavirus, lo que representa poco más del 46% de los compromisos asumidos para traer 130 millones de dosis.
La información, a la que accedió NA, permite inferir algunos de los detalles de los contratos de compra, que se mantienen en el más absoluto de los secretos debido a los acuerdos de confidencialidad firmados con los laboratorios. Por ejemplo, no se fía, ni en medio de una pandemia: las órdenes de pago se fueron librando casi a la par de los envíos de las dosis, aunque también hubo algunos anticipos de dinero para reservarlas.
Respecto a ese último punto, uno de los anticipos más cuestionados fue el de 17.943.873,60 dólares (en pesos se pagó 1.525.229.256) que se hizo al laboratorio anglosueco AstraZeneca el 17 de noviembre de 2020: por ese adelanto y las demoras que hubo en la entrega de las dosis producidas en la Argentina y envasadas en México, el presidente Alberto Fernández y el empresario farmacéutico Hugo Sigman fueron denunciados ante la Justicia.
Orden de pago por casi 18 millones de dólares para AstraZeneca en concepto de «anticipo», que derivó en una denuncia penal contra el presidente Alberto Fernández y el empresario Hugo Sigman.
Según información a la que accedió NA, el Gobierno libró, hasta el pasado 9 de septiembre, 81 órdenes de pago por un total de 694.139.084,25 dólares: en pesos, el número abonado asciende a 63.584.363.392,63.
Esa cifra fue abonada a siete laboratorios: AstraZeneca, Human Vaccine (Sputnik V), Sinopharm, Richmond, Moderna, Cansino Biologics y Pfizer. En el caso de AstraZeneca, se registran pagos tanto por el convenio directo con la firma anglosueca como por el mecanismo Covax, así como para la adquisición de las vacunas Sputnik V se abonó a Human Vaccine, la compañía rusa que la produce, y a Laboratorios Richmond, encargado de la fabricación en la Argentina.
Con esas empresas, el Gobierno acordó la compra de 130.404.710 dosis de vacunas por un valor total de 1.493.022.520 dólares: hasta el 9 de septiembre había recibido alrededor de 55 millones de vacunas (no se contabilizan las 3,5 millones de Moderna donadas por Estados Unidos, ni las 400 mil otorgadas sin cargo por España).
Con esos números, se puede advertir que los cargamentos de vacunas se fueron liberando a medida que entraban los pagos en las casas matrices, que acreditaban la salida del dinero desde la cuenta del Banco Nación.
Hasta el momento, las distintas empresas percibieron las siguientes sumas: AstraZeneca vía COVAX, 7.776.000 dólares (722.816.160 pesos); AstraZeneca contrato directo, 89.719.368 dólares (4.654.640.811,84 pesos); Cansino, 4.420.000 dólares (527.367.200 pesos); Moderna, 129.891.518,32 dólares (12.404.640.000 pesos); Pfizer, 41.514.110,47 dólares (4.006.111.660,20 pesos); Laboratorios Richmond, 19.856.021,25 dólares (2.032.970.407,81 pesos); Sinopharm, 280.891.986,71 dólares (28.020.705.680 pesos); Human Vaccine (Sputnik V), 120.070.079,50 dólares (11.215.111.472,78 pesos). En total, se pagó el 46,49% del total de vacunas acordadas.
En lo que respecta a los precios unitarios de las vacunas, la más costosa es la de Moderna con 21,50 dólares cada dosis, mientras que las de AstraZeneca tuvieron el valor más bajo, con 4 dólares. El resto de los laboratorios fijó los siguientes valores por unidad: Sputnik V, 9,95 dólares; Serum Institute de la India, 4,10; Cansino, 17; y Pfizer, 12.
El caso de Sinopharm es distinto, ya que se firmaron tres acuerdos complementarios: el primero por 4 millones de vacunas a 20 dólares cada una; el segundo por 2 millones a 15 dólares cada una; y el tercero por 24 millones de dosis con un doble precio, ya que el primer millón costaba 15 dólares cada unidad y los 23 restantes quedaban a 9.