8 marzo, 2022
El Fondo Monetario Internacional (FMI) desembolsará a la Argentina más dólares de los que el país deberá pagar en cada vencimiento, según lo acordado para el pago de la deuda que asumió la administración de Mauricio Macri por unos u$s45.000 millones. Se trata de un acuerdo de facilidades extendidas
En los próximos dos años y medio el gobierno argentino recibirá desembolsos del Fondo Monetario Internacional para cumplir con los vencimientos con el mismo organismo internacional durante el período en cuestión cercanos a los 45 mil millones de dólares.
Los desembolsos se harán en la cuenta de Derechos Especiales de Giro (DEG) del país por un monto de 31.914 millones de dólares (que equivaldrían a los 45,000 millones según el memorándum difundido este viernes. Con un costo-diferencia de 13.000 millones).
El primer desembolso llegaría antes del 21 de marzo, una vez que el board del FMI apruebe el acuerdo alcanzado, y siempre y cuando el Congreso apruebe el proyecto de Ley.
Serán once aportes que realizará el organismo a la Argentina
El FMI afirmó ayer que el acuerdo cerrado con la Argentina es «pragmático y realista» y confió en que será aprobado por el Congreso Nacional antes del 22 de marzo, fecha en que opera un vencimiento por USD3200 millones.
El staff que negoció el nuevo programa con la Argentina ofreció una conferencia de prensa virtual encabezada por Ilan Goldfajn, Jefe para el Hemisferio Sur.
Durante la conversación el FMI reveló que la reducción de los subsidios energéticos será del orden del 0,6% del PIB ajustado a un criterio «progresivo».
A su vez, precisó que el sendero de reducción fiscal apunta a obtener el equilibrio en las cuentas públicas en 2025, luego de las pautas ya conocidas: 2,5% del PIB en 2022, 1,9% en 2023 y 0,3% en 2024.
Respecto a las metas de inflación prevista el staff del FMI indicó que «se trabaja con un rango» de entre 38 y 48% para 2022 y luego una reducción de cinco puntos porcentuales en los años siguientes.
En ese sentido, remarcó el valor de la política monetaria para que «generará tasas de interés positivas» y una reducción de la emisión para el financiamiento del déficit fiscal, lo cual, según los técnicos del FMI ayudará a frenar el proceso inflacionario.
Goldfajn recalcó que «es un acuerdo pragmático y realista con políticas económicas creíbles para favorecer la estabilidad macroeconómica».
El funcionario señaló que ya se elevaron los lineamientos del programa al Directorio del organismo, que lo tratará una vez que el programa sea aprobado por el Congreso argentino.
Consultados sobre el «cepo cambiario» la respuesta deja en claro que la Argentina continuará por largo tiempo con este esquema.
«Aquí apuntamos a encontrar formas para mejorar la macroeconomía y flexibilizar los controles a lo largo del tiempo», señaló.
Por su parte, Luis Cubeddu Jefe de la misión argentina informó que el BID, el Banco Mundial y la CAF participarán del acuerdo con un aporte de fondos de 0,4% del PIB durante los años que dure el programa.
El calendario de desembolsos será informado una vez que el acuerdo sea aprobado por el Directorio que encabeza Kristalina Georgieva.
Más allá de los desembolsos que el FMI hará ni bien se firme el acuerdo para que el país no entre en cesación de pagos , Guzmán y Chodos intentan que no se trate de una “ecuación cero”, es decir que no sean tres años por delante sin tener que usar las reservas, pero al mismo tiempo sin que quede nada en las arcas nacionales. “Es parte de la discusión y es lo que demora la firma”, agregaron fuentes calificadas.
Junto con la discusión por los desembolsos, también se busca acordar un sendero “racional” para el esquema tarifario, el otro de los puntos álgidos en los que aún no se alcanzó un acuerdo que satisfaga a ambas partes y acalle a la vez las discusiones internas en el seno de la coalición gobernante.