En las últimas horas, la Justicia de Chaco confirmó que la sangre hallada en la casa del matrimonio Sena, en Santa María del Oro al 1400, centro de Resistencia, era de Cecilia Strzyzowski. Los restos fueron encontrados sobre un colchón que, la semana de la desaparición de la joven, fue desechado en el Barrio Emerenciano Sena en la zona sur de la ciudad. El dato compromete aún más a los tres detenidos por el crimen: César Sena, su padre Emerenciano y Marcela Acuña, pareja del piquetero.
En ese domicilio estaba inscripta la Fundación Saúl Acuña que recibió, sólo durante los primeros seis meses de este año, 140 millones de pesos del Gobierno de Jorge Capitanich para construir viviendas sociales.
En prisión, Marcela Acuña responsabilizó del crimen a su hijo, su marido intentó obtener una prisión domiciliaria alegando problemas de salud, y el hijo del matrimonio piquetero recibió a un sacerdote cercano al poder político mientras que su defensa aseguró, ante los medios, que no existía «ninguna prueba de que Cecilia estuviese muerta».
En los últimos días, la policía local, descubrió que César Sena, había recibido hojas en blanco con tinta indeleble con un número de cuenta del Nuevo Banco de Chaco. Su titular es Marcelino Barrios -CUIT 20-12327942-6 y le había girado un millón de pesos. El ticket bancario, junto con las hojas «en blanco», fueron llevadas a prisión por Mariano Rodolfo Sena, hijo mayor de Emerenciano a su hermanastro.
La cosecha y el millón
La transferencia bancaria se había realizado el 17 de octubre -día de la lealtad- del 2022 desde la Fundación Saúl Acuña al citado Marcelino Barrios. El «beneficiario» subía fotos a sus redes sociales contento con sus cosechas de tomates y trabaja en un corralón llamado «Dios es Fiel» -nombre de fantasía-.
En el Clan Sena son creyentes en Dios. Más aún, Marcela Acuña escribió una carta en la que aseguró que «somos inocentes y aquellos que actúan con malicia que Dios los perdone, han generado mucho dolor, y eso todo Dios lo ve, no se usa el dolor ajeno para posicionarse en una sociedad que cree en los medios de comunicación». El corralón está ubicado en la calle Lisandro de la Torre 2598, Resistencia, que coincide con la dirección oficial del citado Marcelino Barrios.
La inscripción en la AFIP del corralón fue realizada el 10 de junio de 2022. El nombre de fantasía del corralón, «Dios es Fiel», no tiene sociedad comercial que lo respalde. Su categoría ante el fisco es la más baja pero recibió un pago bancario de un millón de pesos de la Fundación de los Sena.
La justicia investiga si Barrios es un testaferro de los Sena y si el llamativo ticket bancario que le llevaron a César Sena, en la que aparecía la transferencia bancaria por un millón de pesos, era un mensaje encriptado o mafioso.
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