5 julio, 2021
Dos subáreas fueron abiertas y otras dos están siendo prospectadas en estos días. Los rendimientos son buenos y las subáreas cerradas mostraron altos niveles de bycatch. Los volúmenes de desembarque son similares a los de 2019, en el orden de las 70 mil toneladas.
Los motivos por los cuales se decidió cerrar la subárea 13, medida que generó tantos comentarios adversos, se conocieron la semana pasada cuando el Consejo Federal Pesquero recibió el informe sobre el comportamiento de la flota entre el 18 y 21 de junio. La alta presencia de merluza fue lo que motivó el cierre: los niveles de bycatch llegaron al 70% y tuvieron una media del 36%, muy superior al 20% permitido.
Respecto de los resultados de la prospección llevada a cabo en las subáreas 10, 11 y 12 se supo que hasta el momento los mejores rendimientos se hallaron durante el segundo día en el límite este de la Subárea 12, con un rendimiento máximo puntual de 19.320 kilos por hora y una disminución del tiempo promedio de arrastre a la mitad.
La reducción del tiempo de arrastre es un dato significativo, dado que habla de una mayor concentración del recurso que por lo general no se encuentra mezclado con fauna acompañante.
En la Subárea 11 las condiciones fueron aún mejores: cuando los buques se desplazaron hacia el noreste de la misma, encontrando mejores concentraciones en el segundo día, señalaron los consejeros en el acta.
En cuanto a la Subárea 10 los resultados no fueron buenos. Se observó un alto porcentaje de las categorías L4 y menores de langostino, superiores al 50% en los dos días en que se trabajó en la zona y altos niveles de bycatch de merluza. Por lo tanto, desde el INIDEP sugirieron que los barcos que estaban afectados a la prospección en esta ubicación se trasladasen a la Subárea 7 con los mismos objetivos.
A partir de la recomendación biológica, la Autoridad de Aplicación comunicó la continuidad de la prospección para ese grupo de barcos en la Subárea 7, delimitada por los paralelos 43° y 44° de latitud Sur y los meridianos 62° y 63° de longitud Oeste. Al mismo tiempo se decidió realizar otra prospección en la Subárea 8, delimitada por los paralelos 43° y 44° de latitud Sur y los meridianos 61° y 62° de longitud Oeste, a partir del día 2 de julio, con 4 barcos que ya cuenten con observador a bordo y estén operando dentro de la veda.
Como es habitual, si los resultados son positivos, el Subsecretario de Pesca ya ha sido autorizado por los consejeros para dar apertura a las subáreas prospectadas. A la vez insistieron en la necesidad de mantener a bordo los observadores hasta que finalice la marea para poder contar con información de las operaciones de pesca. Recordemos que los biólogos sugieren que permanezcan al menos tres mareas, más aún en las actuales condiciones de pandemia que dificultan la operativa de embarque.
Las capturas de langostino al 23 de junio han alcanzado las 70 mil toneladas y la temporada en aguas nacionales recién ha arrancado; los pronósticos de buenos rendimientos se están corroborando. Si lo comparamos con 2019, un año sin pandemia ni conflictos laborales, el nivel de capturas es prácticamente igual. Incluso mientras que en junio de 2019 se capturaron 17 mil toneladas, este año, sin haber concluido el mes, ya se superaron las 18 mil toneladas. Todo parece indicar que hay más motivos para estar tranquilos que ansiosos ante las medidas restrictivas que, al fin y al cabo, garantizan la sustentabilidad de los recursos.