2 enero, 2022
Si hay que hacer un balance de la situación provincial es probable que el escenario coyuntural exponga un altísimo grado de negatividad, sin embargo para el universo financiero que rodea la política, el 2021 cierra bastante redondito en términos financieros, comparado con el colapso inminente que se percibía al inicio de gestión de Mariano Arcioni. Esto se traduce al fin de cuentas en un poco de tranquilidad para los gobernados, aunque cueste en principio ver
Si bien la sábana sigue siendo corta, la gestión de Arcioni se la va arreglando para ir cubriendo alternativamente pies y cabeza, aunque el costo político de su último período de conducción sea brutal. Y eso ha sido en gran parte mérito del contador Oscar Antonena, un ministro de Economía experto en financiamientos, aunque deficitario para la masa en términos de pagos y recomposiciones.
Muchos se preguntan de donde se sacará las promesas de aumentos salariales, de obras millonarias convenidas y otras adecuaciónes que se fueron haciendo durante 2021 tras el cierre de canilla de los años anteriores. Y la respuesta está en dos componentes claves: una es el aumento de ingresos por regalías a partir de la disparada y recomposición del petróleo postpandemia. La otra es el tremendo alivio que le implicó la refinanciación de deuda con una renegociación final de hace unos 40 días que permite blindar no sólo los apurones de vencimientos de los dos años que le quedan de gestión al propio Arcioni, sino los próximos 4 años que le tocarían al próximo gobernador.
Concretamente hace poco más de un mes, a principios de noviembre 2021, el gobierno provincial logró cambiar el perfil de cinco Letras del Tesoro por 110,5 millones de dólares. Vencían el 19 de noviembre y el 3 de diciembre de 2021. ¨Para ello emitió un bono por poco más de u$s 111 millones con vencimiento en 2027.
Esas Letras del Tesoro en dólares que el Gobierno del Chubut canjeó por un bono a largo plazo con vencimiento en 2027, se realizó a una tasa del 7,5%.
Quienes ya no veían luz al final del túnel ante la agónica situación financiera provincial que recayó fuertemente en los empleados publicos y la contracción comercial de las principales ciudades, la situación se fue aclarando paulatinamente aplacando dramatismos, aunque por supuesto con numerosos reclamos vigentes y un altísimo costo social.
En el primer año de la pandemia, con una caída estrepitosa de las tres principales fuentes de ingresos de Chubut (coparticipación, regalías y recaudación propia) y con dificultad para pagar los sueldos estatales, el ministro de Economía, Oscar Antonena, además de escalonar y tratar de sostener la coyuntura con lo que había, salió al ruedo con su primera colocación en dólares. Tarea difícil debido a la renegociación simultánea y altamente confusa de casi todas las provincias argentinas, con un default de Buenos Aires como antecedente y con Nación en plena renegociación con el FMI, núnca hasta ahora resuelta.
La cruzada de Chubut por supuesto fue apuntalada por el principal recurso natural que cotiza fuerte que es el petróleo y por gestiones vinculadas al massismo que ayudaron a aceitar las negociaciones. Así las cosas, el primer paso de renegociación de vencimientos de deudas tomadas históricamente por Chubut Somos Todos de Das Neves y el Frente para la Victoria de Martín Buzzi, fue el 15 de octubre de 2020 a través de las Letras del Tesoro Serie LVII por un monto de u$s 34.500.000 y a un plazo de 30 meses con fecha de vencimiento el 15 de abril de 2023.
La colocación fue con una tasa nominal anual del 5% y un pago trimestral de intereses que comenzó el 15 de enero de 2021.
Los 34,5 millones de dólares de deuda que emitió el Gobierno fueron liquidados a un tipo de cambio de $ 77,1033 por dólar.
El segundo endeudamiento en dólares fue el 3 de marzo de 2021, a través de las Letras del Tesoro Serie LXIV por un monto de u$s 40 millones.
El plazo fue a 275 días con fecha de vencimiento el 3 de diciembre de 2021. La tasa nominal anual fue del 3,75% y tres pagos trimestrales de intereses, dos de los cuales ya fueron abonados.
Los 40 millones de dólares que absorbió Chubut fueron liquidados a un tipo de cambio de $ 89,6383 por dólar.
El 30 de marzo de 2021 volvió a tomar deuda en dólares a través de las Letras del Tesoro Serie LXVII por un monto de u$s 9.027.710 con un plazo de 248 días y un vencimiento el 3 de diciembre de 2021.
La tasa nominal anual también fue del 3,75% con tres pagos de intereses trimestrales, de los cuales dos ya fueron liquidados por el Gobierno del Chubut en los meses de junio y septiembre de este año.
Los poco más de 9 millones de dólares embolsados por Economía fueron liquidados a un tipo de cambio de $ 91,5683 por dólar.
El 19 de mayo de este año llegó el turno de la cuarta colocación en dólares. Fue por un monto de u$s 7 millones a través de las Letras del Tesoro Serie LXXI a un plazo de 184 días y con fecha de vencimiento el 19 de noviembre de 2021.
La tasa de corte fue del 3,50%. Los 7 millones de dólares que tomó la Provincia fueron liquidados a un tipo de cambio de $ 93.9850 por dólar.
Por último, el 2 de julio de este año, el equipo de Economía volvió al mercado para endeudarse a través de las Letras del Tesoro Serie LXXIII por un monto total de u$s 20 millones.
La operación fue a un plazo de 154 días con fecha de vencimiento el 3 de diciembre de 2021. La tasa de interés fue del 3,50% y fue la única emisión que los intereses se pagarían en forma total el mismo día de la fecha de vencimiento de la cuota de capital.
Los 20 millones de dólares que tomó Chubut fueron liquidados a un tipo de cambio de $ 95,59 por dólar.
Finalmente a principios de noviembre de 2021, el gobierno provincial logró cambiar el perfil de cinco Letras del Tesoro por 110,5 millones de dólares que vencían el 19 de noviembre y el 3 de diciembre de 2021. ¨Para ello emitió un bono por poco más de u$s 111 millones con vencimiento en 2027.
En las cinco colocaciones en dólares, el mecanismo de suscripción fue por vía directa del Fondo de Garantía de Sustentabilidad que está bajo la órbita de la Administración Nacional de la Seguridad Social.
Con todo esto, el cierre de año para el ministerio de Economía que conduce Oscar Antonena en términos de negociaciones financieras, fue altamente positivo, logrando sanjar los vencimientos, con pagos parcailes y renegociaciones para adelante. Y su rol, probablemente el más sólido dentro del cambiante gabinete arcionista, dánle oxígeno financiero pese a la asfixia económica y política.
Habrá que ver si esa mínima tranquilidad de vencimientos financieros y mejora de ingresos y flujo, se traduce ahora también en un Plan Económico que contemple derrame y reactivación productiva. Una gran materia pendiente de la gestión, reclamada permanentemente por la ciudadanía y el grueso de las fuerzas vivas.
