Dopaje legal, récords extremos y atletas presentados como “superhumanos”. Con esa premisa provocadora nacieron los ‘Juegos Mejorados (Enhanced Games)’, una nueva competencia que promete romper con todas las reglas del deporte tradicional. A diferencia de los Juegos Olímpicos, este evento permitirá el uso de sustancias y elementos prohibidos en las federaciones internacionales, con el objetivo de ir más allá de los límites humanos.
Según detalla Perfil, la propuesta, financiada por multimillonarios como Donald Trump Jr., hijo del presidente estadounidense, y el fundador de PayPal, Peter Thiel, ya tiene fecha y sede. Será en mayo de 2026 en Las Vegas, Estados Unidos, y promete reunir a atletas dispuestos a doparse legalmente a cambio de recompensas económicas millonarias y la posibilidad de batir récords olímpicos, algo que asemeja a la serie española «Olympo», recientemente estrenada en Netflix.
Desde su web oficial, el evento se promociona como una actualización del deporte tradicional. «Vivimos en un mundo transformado por la ciencia. Pero el deporte se ha estancado. Hasta hoy», sostiene su impulsor, Aron D’Souza, quien plantea la competencia como un “nuevo paradigma de humanidad”. En su visión, el dopaje seguro y controlado no solo mejorará el rendimiento de los atletas, sino que impulsará el desarrollo de tecnologías aplicables al resto de la sociedad.
Sin embargo, el entusiasmo de sus impulsores se contrapone a la creciente preocupación de las federaciones deportivas internacionales. Para la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), los Juegos Mejorados son un «circo» y un «disparate médico y científico», motivo por el que advirtieron sobre los riesgos éticos y sanitarios que conlleva normalizar estas prácticas.
¿Cómo surgieron los ‘Juegos Mejorados’ y por qué se permite el dopaje?
La iniciativa fue creada por Aron D’Souza, un abogado y empresario australiano que se presenta como “reformador” del deporte a nivel global. Según declaró en múltiples ocasiones, su idea nació al observar cómo el progreso tecnológico avanza en todos los campos menos en el deportivo. A su entender, la prohibición del dopaje frena el potencial de los atletas y niega los avances científicos que podrían utilizarse de manera segura.
“Imagínate que una persona de 60 años batiera el récord mundial de Usain Bolt”, comentó D’Souza en una entrevista. La propuesta es crear una categoría alternativa al deporte profesional tradicional, donde el consumo de determinadas sustancias esté legalizado y controlado. Para ello, los participantes deben pasar exámenes médicos exhaustivos y los fármacos utilizados deben haber sido recetados de forma legal. Sin embargo, la organización no especifica qué compuestos están habilitados, apelando a la confidencialidad.

Los Enhanced Games también se definen como un experimento social en pos del progreso. «Estamos creando una nueva categoría de excelencia, un mundo donde las drogas para mejorar el rendimiento se usan de forma segura, abierta y supervisada», afirma su web oficial. El objetivo no es solo batir récords olímpicos y llevarlos a niveles extremos, sino también redefinir los límites de la capacidad humana.
En este sentido, D´Souza comparó a la competencia con la Fórmula 1, alegando que la investigación tecnológica termina beneficiando a la sociedad. «La ciencia y la medicina que se usan para que los atletas logren récords mundiales a edades cada vez mayores permitirán que todos los seres humanos envejezcan de manera más saludable y digna», argumentó.
No obstante, el rechazo de las principales agencias antidopaje fue contundente. La Agencia Mundial Antidopaje y Sport Integrity Australia advirtieron que el modelo es «peligroso, poco ético y perjudicial». Travis Tygart, director ejecutivo de la Agencia Antidopaje de EEUU, fue incluso más tajante: «Es un espectáculo de payasos peligroso, no es deporte de verdad».
Romper récords olímpicos: uno de los principales objetivos de los ‘Enhanced Games’
Uno de los grandes argumentos de los organizadores es que ya existen resultados concretos sobre la utilización de estas sustancias. El caso más citado es el del nadador griego Kristian Gkolomeev, quien en un evento de la organización logró romper el récord mundial de los 50 metros libres con una marca de 20,89 segundos, lo que superaría la lograda en 2009 por Cesar Cielo.
Gkolomeev participó bajo el nuevo sistema y recibió un millón de dólares como parte de un modelo de incentivos económicos para los atletas. Si bien el récord no fue reconocido por las federaciones internacionales, debido a que no hubo control de dopaje oficial ni arbitraje independiente, para los Enhanced Games representa una prueba del “nuevo nivel de rendimiento” posible con ayuda de la ciencia.
“No se trata solo de batir récords. Se trata de superar límites”, dijo el nadador, quien utilizó un traje de baño prohibido por las regulaciones tradicionales y se sometió a un programa de mejoras de rendimiento cuyo contenido permanece en secreto, a pesar de que la empresa prometió constante «transparencia” en la competencia.

Al igual que otras organizaciones deportivas mundiales, la Federación Internacional de Natación (World Aquatics) fue crítica al respecto. “Los Juegos Mejorados no se basan en valores universales como la honestidad, la justicia y la equidad. Son un circo construido a base de atajos”, denunció en un comunicado.
Más allá de las críticas, Gkolomeev se convirtió en el principal emblema de la nueva competencia. A sus 31 años, sin haber logrado medallas olímpicas en sus cuatro participaciones previas, fue presentado como prueba de que los límites pueden romperse. «Debería estar retirado, pero nada más rápido que cualquier ser humano. ¿Por qué? Porque utilizó la tecnología y la ciencia para mejorar su rendimiento», advirtió D´Souza.
¿Cuándo son los ‘Enhanced Games’ o ‘Juegos Mejorados’?
La primera edición se realizará entre el 21 y el 24 de mayo de 2026 en Las Vegas, Estados Unidos. Las pruebas tendrán lugar en el Resorts World Las Vegas, especialmente acondicionado con una pista de atletismo de seis carriles, una piscina olímpica y una plataforma para halterofilia (levantamiento de pesas).

Los atletas competirán en esas mismas tres disciplinas: natación (50 y 100 m libre y mariposa), atletismo (100 m lisos, 110 y 100 m con vallas) y halterofilia (arranque y envión). Cada ganador recibirá 500.000 dólares por evento y quienes rompan récords mundiales obtendrán una bonificación de un millón adicional.
Sin embargo, hasta ahora solo tres atletas confirmaron su participación: los nadadores Andriy Govorov (Ucrania), Josif Miladinov (Bulgaria) y James Magnussen (Australia). Los organizadores esperan sumar más nombres con el incentivo económico y la promesa de una «competencia justa» sin hipocresías sobre el dopaje.
El evento se realizará justo antes del Mundial de Fútbol de 2026, también en EE.UU., y dos años antes de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. Una estrategia que no parece casual, ya que los Juegos Mejorados buscan insertarse en el calendario deportivo global como una alternativa disruptiva y lucrativa. «Estamos construyendo el futuro del deporte», declaró D´Souza.