1 abril, 2021
El Ministerio de Salud de Cuba confirmó 1.015 nuevos casos el 31 de marzo, cifra máxima desde el inicio en la isla que además expone la prevalencia del virus en La Habana.
Las autoridades registraron un total de 75.263 positivos hasta la fecha, entre los cuales 424 personas personas murieron, tres de ellas en las últimas 24 horas.
A la región de La Habana corresponden 477 de los nuevos casos confirmados, informó la agencia de noticias Europa Press.
El presidente Miguel Díaz-Canel urgió ayer a «revisar estrategias» de la capital, incidiendo en que «cortar la trasmisión es el desafío» a día de hoy, a la espera de la llegada de las vacunas.
«Eso sólo se logra cuando el aislamiento domiciliario es efectivo; y no lo está siendo», subrayó el presidente cubano.
Por otro lado, en la reunión efectuada el lunes, donde el Consejo de Defensa Provincial de La Habana analizó la situación epidemiológica, se decidió redoblar esfuerzos y exigir mayores responsabilidades a los municipios.
En este encuentro se discutió un nuevo programa de trabajo dirigido a aplicar medidas de mayor rigor, que incluyen definir con más exactitud el universo de personas a testear incrementar capacidades de aislamiento, precisa una nota publicada por el periódico local Tribuna de La Habana.
Además, se determinó establecer sistemas de control para verificar cómo los casos aislados en las viviendas cumplen con el protocolo establecido, monitorear los espacios públicos para evitar violaciones a las restricciones impuestas.
Uno de los temas pendientes que tienen las autoridades capitalinas es el control de las largas filas en los mercados, a consecuencia del desabastecimiento de productos de primera necesidad y donde se generan aglomeraciones de personas.
Los expertos advirtieron que, aunque ya hay miles personas vacunadas en los ensayos clínicos de los candidatos vacunales cubanos, se deben respetar las medidas de protección, entre ellas el uso obligatorio de las mascarillas.
