4 abril, 2022
EL GOBIERNO TANTEA UNA "LEY CORTA" PARA LEVANTAR EL VALOR DEL BARRIL CRIOLLO
La errónea política de desanclar el precio del barril criollo al petróleo internacional y la readecuación de una Ley de Hidrocarburos amenaza con una crisis inmediata de abastecimiento.
Por el precio, productores de petróleo prefieren exportar: qué pasará con los combustibles a nivel local. La jugada que analiza el Gobierno ante la falta de gasoil, las quejas del campo y el peligro de desabastecimiento de mercaderías.
La errónea política de desanclar el precio local del barril del petróleo del internacional se ha complicado desde el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania. El barril de petróleo se vende en el mercado interno a u$s58 y a nivel internacional a u$s105 y ha llegado a estar en u$s 140 dólares. Con este diferencial de precios los productores locales han optado por exportar y si se mantiene esta tendencia el mercado interno se quedará sin abastecimiento ante la falta de incentivos.
Teófilo Lacroze, el CEO de Raizen adelantó este problema hace dos semanas en la Expo Oil & Gas. Raizen refina petróleo para vender en las estaciones de servicio Shell, y solicitó que se restringieran las exportaciones. La propuesta de la secretaría de Energía es que las petroleras resignen un diez por ciento de lo que exportan y lo destinen al mercado local.
Por ese motivo, analizan permitir una suba consensuada con las petroleras del precio del llamado «barril criollo» hasta los 70 dólares. Esto permitiría incentivar a productores para que destinen un 10 por ciento de lo que exportan al mercado local.
La estatal YPF es la que llevaría adelante la iniciativa. Hay que destacar que la secretaría de Energía no fija el valor del barril por una resolución. pero el peso de la petrolera estatal le pone un techo a las subas. Los números que maneja el mercado petrolero muestran que del total de importaciones de crudo para llevar la refinería al tope de su capacidad, YPF consumiría un 60 por ciento y el resto se lo llevaría en Raizen y Trafigura.
Lo cierto es que la crisis del gasoil puso en pie de guerra a las productoras y refinadoras.
«El problema es que las refinerías de la Argentina tienen una capacidad limitada de procesar Medanito y ya está colmada. Además, el crudo liviano rinde mejor para la refinación en naftas y el escalante, para el gasoil», explicó a iProfesional una fuente cercana a la petrolera estatal. Por ese motivo, desde la secretaría de Energía analizan habilitar una suba del barril local para incentivar a las petroleras que producen Escalante. También se le solicitaría a las operadoras de Vaca Muerta, en particular a las qué más sobre exportaron en estos últimos meses, que se sumen al esfuerzo.
La crisis del gasoil puso en pie de guerra a las productoras y refinadoras
Esta propuesta no va en línea con la estrategia de mediano plazo del ministro de Economía Martín Guzmán y del secretario de Energía para el sector. La misma consiste en incentivar las inversiones para asegurar el ingreso de dólares y reducir la dependencia de las importaciones que son dos alternativas para ahorrar dólares en el futuro.
Esto es lo que proponía la Ley de Hidrocarburos que el Senado cajoneó por la fuerte presión de los gobernadores de las provincias productoras de petróleo. Esta normativa les garantizaría a las empresas exportadoras un saldo de divisas que no tendrían que ingresar al país para poder cubrir sus obligaciones financieras con sus casas matrices y accionistas.
Esto es lo que las multinacionales petroleras le solicitaron a Guzmán en su última visita a Houston hace tres semanas. Desde el ministerio de Economía informaron a iProfesional que están trabajando en una solución para evitar la falta de gasoil. En tanto que fuentes del mercado petrolero explicaron que el principal faltante es del crudo Escalante, una variedad pesada que proviene principalmente de los pozos maduros del Golfo San Jorge. Esto no pasa con el petróleo más liviano que es el Medanito, que se extrae de Vaca Muerta.
Largas colas para cargar gasoil en gran parte del país: ¿ya hay desabastecimiento?
La foto de las largas colas de camiones en estaciones de servicio intentando abastecerse de gasoil en medio de la cosecha gruesa generaron cruces entre las empresas refinadoras y productoras de petróleo y el Gobierno analiza un acuerdo para asegurar el abastecimiento interno.
Con el faltante de gasoil en medio de la cosecha en distintas zonas productivas del país, la Mesa de Enlace mostró su preocupación al respecto y pidió que el Gobierno ponga «en marcha un plan de contingencia» para dar respuesta a la creciente demanda. Además, alertó sobre subas muy fuertes en un producto donde el agro compra el 30% y gasta unos u$s 3.800 millones.
En las últimas semanas, el gasoil ha pasado a ser un recurso escaso en distintas localidades del país, razón por la cual se han registrado subas más que llamativas y la disponibilidad del producto es escasa. Varios productores alertan qué hay localidades donde piden más de $160 y hasta $190 el litro. En este contexto, señalan que el campo también puede ser parte de la solución, ante la falta de combustibles y, dentro de ese plan de contingencia, el biodiesel podría suplir la demanda en las distintas regiones del país.
Fuentes de la industria explicaron que todos los meses faltan 150 mil metros cúbicos de gasoil en promedio que hay que importar para abastecer el mercado local. Sin embargo, a los actuales precios internacionales -con el barril merodeando los 100 dólares-, la ecuación se complica. El Gobierno ahora tantea una «ley corta», tras el fracaso de la ley de hidrocarburos.
La industria del petróleo tipo Escalante es de explotación convencional y está en manos de empresas nacionales entre las que se destacan YPF, Tecpetrol, PAE y no de las empresas internacionales que invierten en shale en Vaca Muerta. La lógica de la inversión en el golfo de San Jorge es de altas inversiones iniciales y bajos costos variables por lo tanto desde el sector sostienen que limitar las exportaciones en el corto plazo no reduciría la producción como sí sucedería en la industria del no convencional.
«Hay que tener en cuenta la disponibilidad de biocombustibles no solo nos puede ahorrar divisas al país, sino que, además de superar una faltante del momento, se estaría promoviendo el uso de energías limpias, sumamente beneficiosas en el medio ambiente», aseguró la agrupación que integran Coninagro, Sociedad Rural Argentina (SRA), Federación Agraria Argentina (FAA) y Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).
Hay que mencionar que el sector liquidó unos 3.000 millones de dólares de acuerdo con los números informados este viernes por la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (SEC). Este total marca el mejor marzo de los registros de los últimos 20 años. Así, el ingreso de divisas acumulado de la agroexportación en el primer trimestre alcanzó unos los u$s 8.000. Lo liquidado en marzo significó un incremento de 7% respecto del mismo mes del año anterior, y un aumento de 16% en relación con febrero último que representan el 48% de las exportaciones argentinas.
La falta de gasoil en algunos puntos del país puso en alerta a la totalidad del sector de transportes en Argentina ante los problemas en la distribución de diferentes mercaderías en distintos lugares del país.
Permitirían una suba consensuada con las petroleras del precio del llamado «barril criollo» hasta los 70 dólares para que destinen un 10% de lo que exportan al mercado local
Desde la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), sostienen están muy preocupados porque con estas señales va a haber desabastecimiento no solo de combustibles sino de todo tipo de mercaderías ya que el 90% de las mercaderías que circulan en el país se trasladan en camiones y al no haber combustible, en vez de hacer 10 viajes se puede llegar a hacer 6 o la mitad siempre que se consiga combustible.
Advierten que en 20 días podría haber desabastecimiento porque el campo empezó a demandar más gasoil por el comienzo de la cosecha gruesa. El transporte de granos, que demanda una importante cantidad de camiones durante la cosecha gruesa y que está empezando a dar sus primeros pasos en el centro del área agrícola nacional, no quedará a un costado de esta situación.
A la falta de gasoil se sumó desde el viernes pasado el problema del abastecimiento de GNC. Un grupo de estaciones de servicio de la provincia de Buenos Aires ya registran faltantes de ese producto y no están comercializando este combustible. Según información de las empresas distribuidoras y de las cámaras que agrupan a los estacioneros, se trata de las estaciones que cuentan con contratos interrumpibles y los cortes en el suministro se deben a problemas operativos.
El detonante fue que uno de los productores dejó de inyectar gas al sistema por tareas de mantenimiento en sus equipos y el jueves debía entrar nuevamente, pero lo hizo de forma más lenta de lo esperado. Camuzzi es una de las empresas distribuidoras que abastece a unas 260 estaciones de servicio en las provincias de Buenos Aires y La Pampa, de las cuales la mitad, unas 130, tienen contratos «interrumpibles».
Las empresas distribuidoras y las cámaras que agrupan a los estacioneros anunciaron que se trata solo de las estaciones que cuentan con contratos interrumpibles y los cortes en el suministro se deben a problemas operativos. El jueves a las 18 horas, la empresa informó a esas estaciones de GNC que se abstengan de comercializar el producto hasta nuevo aviso.
«A partir de la fecha y hasta nuevo aviso, dada la situación imperante en el sistema de gas, no podrán disponer de consumo de gas en carácter interrumpible. Requerimos ajustarse estrictamente a los volúmenes autorizados por esta Distribuidora», fue el mensaje que recibieron. Según fuentes de la empresa, las estaciones que tienen otro tipo de contrato están funcionando con normalidad.
«Estamos con cortes en las estaciones que tienen contratos interrumpibles y se deben a que una de las productoras de gas estuvo una semana en tareas de mantenimiento. Pero esto no se siente tanto en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires porque la mayoría de las estaciones, el 98%, se maneja en esa zona con contratos firmes. El caso de La Plata es diferente porque por una decisión de las propias estaciones, la mayoría tiene contratos interrumpibles. De 40 estaciones, solo cinco tienen contratos firmes», explicaron a iProfesional desde la Cámara de Expendedores de GNC.
Desde Cecha advirtieron la semana pasada que el sector ya enfrenta las primeras señales de desabastecimiento en combustibles claves como gasoil y el diesel. Y detallaron que hay estaciones de servicio que están operando con un sistema de cupos que en algunos casos es de 15 litros de gasoil por cliente.
«Los dos aumentos de precios en los combustibles aplicados durante este año no achican el desfasaje del 32% que hay entre el precio internacional del barril del petróleo y su valor de venta en el mercado local. Hoy hay escasez, porque las petroleras compran caro afuera y venden barato en el país. Intentamos explicarle esto al Gobierno por todos los medios, pedimos reuniones, gestionamos por todas las vías y no fuimos escuchados», explicaron.
El mercado de las estaciones de servicios tiene dos tipos de contratos: interrumpibles o firmes, que son más caros pero garantizan mantener el suministro cuando hay escasez. La decisión del tipo de contrato depende de la decisión de cada estación de servicio y cuando hay escasez, las empresas dan prioridad al consumo en los hogares y cortan primero los contratos interrumpibles de empresas y estaciones de servicio que es lo que ocurre en la actualidad.
*iP/by C. Arbía