18 diciembre, 2021
La Copal, que nuclea a las alimenticias, quiere pasar del pago del actual ajuste por inflación de ganancias que se hace en cuotas en tres años a un solo pago anual, porque esto le genera a las empresas del sector una ganancia onetaria teórica.
Desde el restablecimiento del ajuste del impuesto de ganancias por inflación su imputación se realizó en cuotas. Ese beneficio termina este año y la idea del oficialismo era prorrogarlo, hasta que irrumpió el lobby de la Copal.
El ajuste por inflación del Impuesto a las Ganancias solo se aplica a los activos y pasivos monetarios y esto le genera a las empresas con una posición financiera deudora una significativa ganancia monetaria (teórica) gravada por el impuesto.
Las empresas industriales más grandes -y algunas pymes también- que llevan adelante inversiones productivas de largo plazo y se financian en dólares, cuentan con una posición financiera neta deudora.
En el extremo opuesto están las instituciones financieras y/o fondos de inversión -y algunas alimenticias-, que cuentan con una posición financiera neta acreedora, y se benefician con un ahorro fiscal.
Las empresas industriales sostienen que para evitar que el mayor costo fiscal afecte la inversión productiva y la generación de empleo se debería extender el mecanismo de cuotas para el pago del ajuste por inflación de ganancias.