7 noviembre, 2021
Martín Guzmán llegará a Chubut, específicamente a Comodoro este lunes en una visita oficial pero informal donde junto al ministro del Interior, Wado de Pedro mantendra reuniones con empresarios y funcionarios,y también se hará tiempo para la campaña política con el expreso respaldo a los candidatos del FdT.
En la agenda que trascendió figuran el reconocimiento al pago del adicional por zona como uno de los temas que central que el ministro de Economía de la Nación mantendrá en la ciudad con empresarios, según anticipó el secretario de Hacienda del municipio de Comodoro, Germán Issa Pfister. Concretamente le pedirán que se tome la zona desfavorable a cuenta de impuestos.
“La visita del ministro está plenamente confirmada para el lunes y ya cuando nos visitó el presidente Alberto Fernández, en el marco de las capitales alternas, dijimos que nos gustaría contar con la visita del ministro Guzmán”, dijo el funcionario local, en diálogo con Periodismo de 10.
“En ese momento estaba con la agenda complicada, preparando el encuentro del G20 pero el Presidente nos anticipó que sería posibles sobre fines de octubre o noviembre, así que ahora nos confirmaron la disponibilidad y es una gran noticia, sobre todo para poder hablar en primera persona y cara a cara sobre cuestiones que nos gusta saber y preocupan en el marco de la situación que viven algunos sectores puntuales de la región, que van a tener la posibilidad de una cena y escuchar al ministro, que después abrirá la posibilidad de que le hagan preguntas”.
“Hay tema comunes que se hablaron ese día, como el pago del coeficiente por zona desfavorable que contemplan muchos convenios de trabajo y que se viene pidiendo que sea tomado a cuenta de futuros impuestos –reseñó-, o también algunas inquietudes de pymes locales sobre posibles moratorias impositivas de la AFIP a partir de deudas que se generaron el año pasado por la pandemia y así un montón de temas que irán surgiendo en la charla, que será algo distendido para poder conversar”.
Además se supo que habrá una cena con empresarios y referentes políticos en la recta final de las elecciones Legislativas en una provincia donde le oficialismo pone en juego tres bancas esencialesen la Cámara Alta.
El momento es complicado para Guzmán para ausentarse de CABA todo un día, por eso nadie arriesgó hasta último momento la confirmación de la visita.
En el mercado existen cada vez más dudas sobre la fortaleza del Banco Central para sostener un escenario que mete presión cambiaria y abre interrogantes sobre los pagos de la deuda, todos los días, y mucho más en el inicio de la semana de la definición electoral.
Las reservas ingresaron en zona roja durante las últimas semanas, lo que encendió todos los alertas en el equipo económico, y disparó la medida extrema de impedirle a los bancos comprar divisas.
La decisión, consensuada entre el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el jefe del BCRA, Miguel Pesce, es una de las últimas opciones antes de adoptar una medida que el mercado da por hecha: devaluar.
La depreciación del peso es inevitable, coinciden todos los especialistas, y la única duda es si el Gobierno tendrá las espaldas para hacerlo a lo largo de varios meses, o si deberá devaluar fuerte de una sola vez.
«Si se quiere recuperar algo del terreno perdido, el gobierno tendría que devaluar por encima del ritmo de la inflación varios meses», coincide Rodrigo Alvarez, de la consultora Analytica.
Convencer al mercado requiere un plan de estabilización económicamente viable que se pueda implementar desde el punto de vista social.
Es una cuestión que le preocupa al FMI, y que habría sido planteada durante la prolongada jornada de trabajo que Guzmán mantuvo con los referentes técnicos del organismo en Roma.
Este tema es otro de los agendados por el empresariado comodorense cuya actividad central está atada al petróleo, la pesca, la construcción y el comercio.
La titular del Fondo, Kristalina Georgieva, lo habría planteado también durante el encuentro con Alberto Fernández.
A partir del 10 de diciembre, el Congreso argentino tendrá cambios, y tal vez el más significativo sea la probable pérdida de quorum propio que el oficialismo tendría en el Senado.
Las reservas netas llegarán a la zona de los USD 2.500 millones hacia fin de año, lo cual obligará a cerrar un acuerdo con el FMI si no se quiere caer directamente en default.
Una brecha cambiaria superior al 100% impide crecer, porque casi no llegan inversiones, lo cual impide acumular reservas.
Economistas coinciden en que si el movimiento del tipo de cambio no se produce en el marco de un endurecimiento de la política fiscal y monetaria, de un anclaje de expectativas, tampoco funcionará.
El problema es que cualquier política de ajuste agravará la pobreza, que se mantiene por encima del 40%.
El Fondo Monetario parece no estar dispuesto a aceptar una estrategia que deje a la Argentina sin chances de acumular reservas.
La oposición tampoco aceptará un programa de estas características, porque implicaría que todos los ajustes se posponen para el próximo gobierno.
Un ejemplo son las tarifas de servicios, donde el 70% del costo es subsidiado.
Los días anteriores a las elecciones legislativas encuentran al Gobierno tratando de controlar los precios, en un escenario inflacionario que vuelve a ubicarse por encima del 3%, un nivel muy alto.
Ese costo de vida se mantiene elevado a pesar de que los combustibles no suben y las tarifas de servicios siguen estables.
Este 2021 cerrará con una inflación por encima del 50%, la segunda más alta del mundo.
El Presidente destaca que la economía está creciendo al 10% anual, pero olvida aclarar que para el 2022 la perspectiva de alza del Producto Bruto no supera el 4%.
Siempre parece haber una media verdad en la política económica, y para el mercado ese escenario lleva impreso siempre el mismo nombre: «Incertidumbre». De todo esto seguramente interpelarán a Guzmán en Chubut en el mano a mano que unos pocos tendrán con el ministro nacional.
