29 agosto, 2021
A través del Ministerio de Turismo y Áreas Protegidas de la Provincia, se brindó al Aeroclub de Comodoro Rivadavia en calidad de comodato, la maqueta del avión para que sea exhibida.
El gobernador del Chubut, Mariano Arcioni, firmó este sábado un convenio con el Aeroclub de Comodoro Rivadavia para exhibir en sus instalaciones la maqueta del Late 25, réplica del avión de Antoine Saint-Exupery.
El mandatario provincial estuvo acompañado por el ministro de Turismo y Áreas Protegidas del Chubut, Néstor Garcia, la subsecretaria de Turismo, Natalia Leske, el presidente del Aeroclub, Pablo Arcioni, y demás miembros de la institución.
Luego de la firma del convenio, el ministro Garcia señaló que “estuvimos con el Gobernador visitando las instalaciones del Aeroclub donde firmamos un convenio de comodato para trasladar el Late 25, que es una réplica del avión de Saint-Exupery, el cual será reparado y exhibido en el Aeroclub”.
“Tras recorrer el predio, charlamos diferentes alternativas para ver la posibilidad de acompañarlos y organizar actividades turísticas con el Aeroclub, ya que cuentan con más de 20 aeronaves allí apostadas. También dialogamos sobre el posible acompañamiento del Ministerio de Turismo en la edición de un libro sobre la historia del lugar”, señaló Néstor Garcia.
Antoine Marie Jean-Baptiste Roger Conde de Saint-Exupéry fue un aviador y escritor francés, más conocido por su emblemática obra El principito que por sus múltiples servicios como piloto en épocas donde la aviación comenzaba sus primeros pasos. Dirigió desde muy jóven la cuadrilla que transportaba correo por gran arte del mundo.
En 1928 se trasladó a Sudamérica. Vivió en Concordia, Argentina, pero en Buenos Aires conoció a quien sería su esposa, la millonaria salvadoreña Consuelo Suncín, fue nombrado director de la empresa Aeroposta Argentina, filial de la Aéropostale, donde tuvo la misión de organizar la red de América.
A partir de 1931, la progresiva bancarrota de la Aéropostale puso término a uno de los capítulos más épicos de los pioneros de la aviación, aunque todavía se extenderían sus hazañas hasta la revolución aeronáutica provocada por la Segunda Guerra Mundial.
En toda su carrera tuvo la misión de pilotear varios aviones. Uno de ellos se encuentra en el Museo Nacional de Aeronáutica de Morón que guarda el último ejemplar que existe en el mundo del Avión «Latecoere 25», construido en 1925 para uso de la línea aérea propia de Latecoere, que realizó la primera aeroposta en Argentina. Esta aeronave fue tripulada por Antoine de Saint-Exupéry.
Dicen o imaginan que la Isla de los Pájaraos podría haber sido la inspiración de unos de las figuras más emblemáticas de El Principito: la boa que se tragó un elefante.
En el relato Saint Exupery dice:
«-¿Por qué habría de asustar un sombrero? – me respondieron.
Mi dibujo no representaba un sombrero. Representaba una serpiente boa que digiere un elefante. Dibujé entonces el interior de la serpiente boa a fin de que las personas mayores pudieran comprender. Siempre estas personas tienen necesidad de explicaciones. Mi dibujo número 2 era así:
Las personas mayores me aconsejaron abandonar el dibujo de serpientes boas, ya fueran abiertas o cerradas, y poner más interés en la geografía, la historia, el cálculo y la gramática. De esta manera a la edad de seis años abandoné una magnífica carrera de pintor. Había quedado desilusionado por el fracaso de mis dibujos número 1 y número 2. Las personas mayores nunca pueden comprender algo por sí solas y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones.
Tuve, pues, que elegir otro oficio y aprendía pilotar aviones. He volado un poco por todo el mundo y la geografía, en efecto, me ha servido de mucho; al primer vistazo podía distinguir perfectamente la China de Arizona. Esto es muy útil, sobre todo si se pierde uno durante la noche (…)».
El último viaje. Dicen que el 31 de julio de 1944, el comandante Antoine de Saint-Exupéry se mete en su avión, un Lockheed P-38 Lightning para una misión fotografica por encima de la zona de Grenoble y Annecy, para preparar el desembarco de Provenza. El avión desapareció del radar a las 14:30, en el enfoque de la Riviera. El misterio comienza.
El 7 de septiembre de 1998, Jean-Claude Bianco, un pescador de Marsella, descubre en sus redes una pulsera grabada con el nombre del aviador. Este hallazgo llega a los oídos de Luc Vanrell, explorador y fotógrafo submarino , que en los años 80 descubrió un pecio que creía alemán. El avion esta a 70 metros de profundidad, cerca de la isla de Riou, en el puerto de Marsella.
Así se inició un estudio arqueológico muy difícil porque dos planos estan dispuestos en el mismo lugar y sus restos son anidados. Fue durante el descubrimiento de un panel del turbocompresor, que el numero 2734 aparecio (número de aviones del escritor) seguido de la letra L como Left. Asi los restos del naufragio fueron finalmente identificado como los del avión de Saint-Exupéry. Hoy en día una parte de los restos del avion pueden ser visto en el museo del Bourget, el resto todavía está bajo el agua…
