25 julio, 2023
La maquinaria electoral en la Argentina continúa su curso rumbo a la primera gran definición nacional el próximo 13 de agosto. Desde el inicio del calendario, ya hubo comicios en 16 Provincias y en 13 ya se eligió gobernador, en sintonía con la estrategia política de los mandatarios locales para desacoplar su suerte del gobierno nacional, afectado por la crisis política y económica.
Como tendencias se puede decir que hasta ahora vienen ganando los oficialismos, con excepción de San Juan, San Luis y Neuquén y que cada resultado local es nacionalizado. No importa si se trata de un pequeño pueblo o la capital de una provincia clave. La necesidad de mostrar triunfos (y remarcar derrotas del rival) llevan a que la exageración sea moneda corriente a la hora de mostrar fortaleza electoral. Sin embargo, en el mapa electoral nacional habrá muchos provincialismos que terminarán de volcar la balanza.
Por eso, a poco más de 3 semanas de las PASO, el peronismo y Juntos por el Cambio siguen con atención lo que pueda ocurrir el próximo domingo en Chubut, última elección provincial antes de las primarias nacionales.
El próximo domingo 30 de julio, Chubut tendrá elecciones sin PASO y definirá su próximo gobernador en circunstancias bastante particulares. Tras 20 años de conducción caudillista y populista, luego de una profunda crisis de liderazgo primero y económica después, la contienda encuentra al oficialismo unido formalmente pero atomizado en los hechos. Mientras que la oposición muestra unidad pero compite con el aparato y el efecto tardío de las pocas ventajas comparativas que recibió la provincia durante el gobierno de Macri que genera algunas dudas en el electorado con memoria.
En estas elecciones la tendencia viene polarizada. Se enfrentarán Ignacio Torres (Juntos por el Cambio) y Juan Pablo Luque (Arriba Chubut).
La novedad es que el oficialismo logró la unidad después de más de 20 años para frenar lo que las encuestas dan como un triunfo de la oposición.
Luque, al estilo kirchnerista en el ámbito nacional que se despega del presidente Alberto Fernández, hizo lo mismo separándose del gobernador Mariano Arcioni. “Yo con Arcioni no tengo nada que ver. En las últimas elecciones fui en al boleta con (Carlos) Linares”, disparó. Este ‘desconocimiento’ del gobierno actual resultó en que Arcioni no pudo quedarse con el primer lugar en la lista para la Cámara de Diputados. Allí se quedó el actual titular de la Policía Aeroportuaria Nacional (PSA), José Glinski.
Si la oposición logra imponerse sería un batacazo, ya que hay hegemonía justicialista desde hace más de dos décadas. El último censo marcó que el territorio posee 603.000 habitantes. Para ganar, la elección es similar a la de la provincia de Buenos Aires: se llega al Poder Ejecutivo con mayoría de sufragios, es decir que alcanza con un voto más que el segundo y no hay balotaje.
Los otros tres candidatos en la carrera a la gobernación son César Treffinger (Por la Libertad Independiente Chubutense), Emilse Saavedra (Frente de Izquierda) y Oscar Pettersen (Generación por un Encuentro Nacional).
