28 marzo, 2022
Por Juana de Arco*
Si alguien decía hace unos años que Miguel Castro reemplazaría a ‘un’ Das Neves seguramente la muchachada le sugeriría que deje el aperitivo de inmediato. Pero parece que así será este martes, cuando el cholilense y expolicía Miguel Castro vuelva a un ministerio provincial clave, tras prácticamente 30 años de reiterada supervivencia por la función pública, y no pocas polémicas.
Para los que piensan que en política ‘nada se pierde, todo se recicla’ es probable que este sea un caso que confirmará esa regla, y con creces, ya que Castro es uno de los funcionarios que ha logrado el derrame de ríos de tinta a nivel provincial, y sin embargo sigue vigente y en funciones.
Este fin de semana los medios oficiosos lo anticiparon como el elegido para la sucesión del exministro de Seguridad Leonardo Das Neves, que cayó en desgracia paradójicamente por un hecho que fue el eje de su trabajo preventivo: un derrape de tránsito casi mortal y con múltiples irregularidades encima.
Castro, salió entonces personalmente a confirmar su designación, algo que al escribano no le gusta que le anticipen, pero que al parecer viniendo con bendición “de arriba” haría una excepción con el exponente de los pagos de Buch Cassidy.
El tema es que don Héctor Miguel tendría en varios frentes tanta resistencia popular como el ‘sí a la mina’. Por lo cual el gentío que chusmeó profusamente por la redes el fin de semana, en general chubutanos con memoria, no llegaba a comprender de fondo la ocurrente elección de Arcioni.
“¿Quién lo asesora a Mariano? ¿Lucifer?”, se interrogó para sí y para su comunidad un vecino del Valle. A lo que alguno respondió que podría ser el mismísimo Mefistófeles, pero también Sergio, o alguien más…
Castro caería ‘parado’ en el ministerio de Seguridad, donde alguna vez sonó su nombre incluso como reemplazo del mediático Federico Massoni. El tema es que el organismo ya venía muy caliente como para sumarle prensa. Pero ahora ante la renuncia de Das Neves, el encaje parece ser menos complejo, piensan en Rawson.
La salida inesperada de Das Neves, como se sabe, se produce luego de que el jueves pasado protagonizara un accidente mientras se trasladaba junto a su familia en un auto oficial el feriado por el Día de la Memoria, circunstancia en la que atropelló a un ciclista en la ruta 7. El joven se encuentra en terapia intensiva, intubado y fue operado de la cabeza, encontrándose en coma.
Castro sabe bien de este tipo de accidentes que traen cola. De hecho, el mismo tuvo un siniestro con un auto oficial en circunstancias nunca del todo detalladas, al chocar con un caballo a la salida de Madryn. El dato núnca confirmado ni desmentido fue que arriba del Vento marrón iba «El Cura» Segundo (actor principal de ‘Langostino Santo’) con un maletín que no soltó a pesar del palo. Era de madrugada y Madryn ardía por la quiebra de la empresa Alpesca, la mejicaneada a los más de 2 mil empleados que quedaron boyando, y el escándalo político que rodeó el salvataje crediticio oficial que se habrían bolsiqueado algunos.
Ahora, con la inmediata renuncia de Das Neves se buscó en definitiva evitarle mayores roces a la gestión de Mariano Arcioni con un nuevo hecho de impunidad oficial, en momentos en que el gobernador intenta reflotar su imagen con ordenamiento de las cuentas y relanzamiento político en puerta del Frente Renovador en territorio. Y para ello, el experimentado Castro volverá a entrar al ruedo.
Pero la designación de Miguel Castro puede salir muy bien, o ser otra de esas decisiones que producen el efecto contrario al buscado. De allí la necesidad de evaluarse que le podría aportar a la gestión del escribano, y que cosas arrastra en su haber político que podrían perjudicarlo. Un punteo de antecedentes tipo ‘abogado del diablo/asesor’ permite alguna idea:
1-EXPERIENCIA EN GESTIÓN, PERO CON SOSPECHAS DE MÁS FUERZA QUE MAÑA
.Pro: Miguel Castro es expolicía, y ya fue ministro de Seguridad y Justicia de Mario Das Neves, Ministro Coordinador de Martín Buzzi e intendente de Cholila, por lo que podría aportarle a Arcioni sobre todo en experiencia y manejo de políticas de seguridad y control de tropas, sin la versión cinematográfica de Federico, pero con más pimienta que la insípida rutina vial de Leonardo.
.Contra: El tema es que durante su gestión hubo hechos tan terribles como la muerte del joven Antillanca a manos de policías y otros tantos señalamientos por abusos y mano dura. Castro como ministro de Gobierno de Mario Das Neves, era responsable por ejemplo de la Secretaría de Seguridad y Justicia, y en cuanto tal responsable de la Policía. La fiscal Mirta Moreno demostró la responsabilidad de la fuerza en el encubrimiento del crimen de Antillanca mediante la adulteración de pruebas para proteger a los efectivos involucrados.
Ese año 2010 parece haber sido bisagra en el desempeño de Castro como ministro de Gobierno y Justicia, no sólo tuvo que afrontar el caso Antillanca sino que meses antes tuvo que poner el pecho a la pueblada que se produjo en Madryn tras el abuso y asesinato de la pequeña Leonela Aguirre (10). Otra investigación y proceso que no convenció a la mayoría de los vecinos, y donde el entramado de fondo núnca se llegará a terminar de concoer posiblemente.
En mayo de 2011, el que lo puso lo sacó!, y fue el mismísimo Das Neves quien le pidió la renuncia a Castro al igual que al jefe policial José Castaño por las múltiples denuncias de abusos y violencia policial. Y eso que don Mario era de sostener a los suyos y bancar la parada…
Pero de arrastre había mucho ruido, desde que como ex policía, Castro era recordado en Cholila por instalar antenas de TV satelital para compensar su magro sueldo, hasta el choreo de durmientes de tren que rozó a varios, el hombre arrastraba controversias de origen.
2- CONOCIMIENTO INMOBILIARIO, PERO CON SOSPECHAS DE CURRO VERDE
.Pro: Castro le puede aportar a Arcioni un mapa de ruta para posicionar a su próximo armado electoral en parte de la Cordillera y el interior provincial. Y de hecho sería bien visto y promovido por el propio Sergio Massa, merced a los vínculos comunes con terratenientes cordilleranos cercanos al presidente de la Cámara de Diputados y también al aspirante a ministro.
.Contra: El tema es que desde 2003 Castro es sospechado por negocios ‘poco claros’ con tierras con bosques nativos y considerado lobbysta de fuertes intereses inmobiliarios en la cordillera. La Izquierda Diario recordó este fin de semana que “adscripto a la candidatura a gobernador de Lizurume por la UCR, Castro se mudó al poco tiempo (ya durante el gobierno peronista) a una lujosa mansión en las afueras del pueblo que levantó grandes sospechas en torno a negociados inmobiliarios en base a los decretos 712/04 y 74/05 de la administración Das Neves, derogados en 2019 por la Legislatura provincial”.
Hay ejemplos varios y resonantes, el tema es que ninguna causa ‘sospechosamente’ properó. Por ejemplo el fiscal Martín Zacchino confirmó ayer “más de diez allanamientos simultáneos en las ciudades de Esquel, Cholila, Villa la Angostura, Villa Ballester y Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, en el marco de una investigación por «supuestas maniobras fraudulentas en torno a tierras en la Comarca Andina, en las que se trata de esclarecer la participación del municipio de Cholila en una de las causas -la de la familia Perry-, y del Instituto Autárquico de Colonización y Fomento Rural (IAC), en el caso Gérez”. De esa causa, ni noticias. (Ver https://www.rionegro.com.ar/confirman-investigacion-por-venta-irregular-de-tierras-en-cholila-AGRN_687403/)
“En el año 2004, Castro vendió 48 hectáreas de tierras fiscales con bosque nativo a orillas del Lago Lezana al norteamericano Stephen Robinson Bussey a razón de $1100 la hectárea. Poco después, el municipio compró parte de la misma propiedad a Bussey con un galpón abandonado como mejora en u$s200.000 a pagar en 20 años con una tasa de interés del 8%. Y hasta 2027 el pueblo de Cholila pagará este negociado. Bussey, además, instaló una pequeña represa en el Lago Lezana donde buscaba instalar un emprendimiento hidroeléctrico (Hidroeléctrica Lago Lezana S.A.) sin ningún tipo de estudio de impacto ambiental ni permiso. La situación fue conocida por la denuncia de ambientalistas en 2006, pero fue encubierta por el propio Castro y el gobernador Das Neves, de quien se sospechaba que Bussey sería testaferro. En realidad, Bussey dijo tiempo después que ‘en realidad el testaferro era Das Neves’ (sic) ”.
¿Y de quién sería testaferro Das Neves? Habría que revisar entre sus cercanos y encumbrados que perduran en acción, no?
Como si fuera poco, a Castro también se lo vinculaba en el enjambre territorial y siempre ‘off de récord’, con un tal O’Reilly, desarrollador de barrios privados en la comarca, integrante del Opus Dei, que llegó a figurar en WikiLeaks como nexo de encumbrados políticos vigentes y de confianza de la Embajada norteamericana en la Argentina, que además tendrían ahijado político provincial.
Lo que es más grave, más allá de los negociados que pudieran haber existido, que ya es mucha data, es que el poder vinculado a los negocios suele convertirse en mafia y actuar hasta los extremos mas impensados.
Uno de estos casos fue la desaparición en Cholila de Genaro y Cristian Calfullanca, padre (46) e hijo (19) mapuches desaparecidos en la Semana Santa de 2013 cuando estaban haciendo un alambrado en el valle del río Tigre, al fondo del lago Cholila, de quienes hasta hoy no ha surgido el menor indicio de su paradero conviertiéndose en desaparecidos en democracia, siempre en Chubut.
Las hipótesis apuntan a que “eran testigos claves en la investigación de una venta de tierras en la que estaría involucrado un exintendente de la zona (Miguel Castro)», según reportaron incluso medios nacionales. (Ver https://www.laizquierdadiario.com/Genaro-y-Cristian-Calfullanca-padre-e-hijo-mapuches-desaparecidos-hace-cinco-anos-en-Chubut) Tres ese caso dicen que hubo aprietes a los fiscales que investigaban y mucho teje proveniente de los espacios prolíticos para que el caso quedara en el recuerdo apenas de la comunidad mapuche cordillerana.
3-ADAPTACIÓN FUNCIONAL, AUNQUE CON SOSPECHAS DE EXCESIVA MALEABILIDAD PARTIDARIA
.Pro: No hay que olvidar que Castro es todo un sobreviviente que aunque cuestionado siempre salió ileso políticamente hablando y absuelto por la justicia. Y que es funcionario público desde el año 2003, y nunca dejó de serlo hasta la fecha. Además logró construir su trayectoria en el mundillo peronista provincial, siendo radical en principio y desde la pequeña intendencia de Cholila, lo que no es un dato menor. Siendo adscripto en el gobierno de Lizurume, fue bendecido luego por Mario Das Neves como uno de los outsider del engendrado PROVECH, y posteriormente despedido por él mismo. Pero inmediatamente se pasó de bando y asumió funciones con Buzzi, cambiando tono político hacia el Frente para la Victoria. Ahora se sumaría desde el Chusoto, o del FreReChu que busca inaugurar Sergio. De ahí la admirable ‘maleabilidad’ ideológica y partidaria de un elemento que podría contribuir a diferentes alianzas y ampliar el diálogo al gobierno de Arcioni, donde la salida de Grazzini dejó también un vacío político a nivel ‘rosca’ fuerte.
.Contra: Castro, nunca dejó de trabajar como funcionario esté el gobierno y el partido que esté. De hecho, actualmente se desempeña -desde junio de 2014- como Jefe de Operaciones del Servicio Provincial de Manejo del Fuego, precisamente en una provincia con incendios múltiples, frecuentes y no pocas veces intencionales, a los que los más mal pensados siguen vinculando a los negocios inmobiliarios.
En fin. Hay laburo para procesar y digerir esta designación sin dudas a la que se animará Mariano Arcioni. Y es que la política chubutense sigue generando estas sorpresas merced a las contradicciones cicateras, como pregonar recambios, pero promover históricos. Como dijera John Lithgow, “No te fíes de las cosas correctas que se hacen por la razón equivocada. El porqué es la base”
*Soy Juana de Arco, amiga de Donald… y ceniza de tantos
*(esta nota se actualizó a las 12:18/ 28/03 con aportes e informes participativos)