6 septiembre, 2022
“A quienes entran tienen grandes varias tareas. Necesitamos una nueva coordinación del Gobierno, quiero que en conjunto fortalezcamos la coalición que nos respalda”, remarcó Boric.
Los cambios más importantes fueron la salida de la ministra del Interior Izkia Siches y del ministro Secretario General de la Presidencia de Chile, Giorgio Jackson, que sin embargo se quedará en el Gobierno como ministro de Desarrollo Social y Familia.
«Duele, pero es necesario. Es quizás uno de los momentos políticamente más difíciles que me ha tocado enfrentar”Gabriel Boric
Luego del nombramiento de la nueva ministra del Interior, el presidente salió de protocolo y cruzó el patio donde se realizaba el acto para saludar con un abrazo a la Siches, quien se mostró muy emocionada.
Los demás ministros salientes fueron María Begoña Yarza (Salud), Claudio Huepe (Energía) y Flavio Salazar (Ciencias).
Este es el primer cambio de gabinete de Boric desde que asumió en marzo.
Hace unas semanas hubo un ajuste ministerial luego de que Jeanette Vega presentara su renuncia como titular de Desarrollo Social, tras la filtración de una llamada de su asesora con Héctor Llaitul, líder detenido del grupo radical mapuche Coordinadora Arauco-Malleco.
«Este cambio de gabinete no es solo protocolar ni para una foto. Aquí cambia también el comité político que es la conducción de nuestro Gobierno”, dijo Boric y agregó que el nuevo gabinete “hace suyo el mandato del cambio, de transformación, por el cual llegamos a La Moneda”.
La decisión se da después de que la propuesta de nueva Constitución, elaborada con el fin de sustituir la carta magna vigente y uno de los proyectos insignia de Boric, fuera rechazada este domingo en el plebiscito constitucional con 61,87% de los votos, mientras el 38,13% se manifestó a favor del apruebo.
«Este cambio de gabinete no es solo protocolar ni para una foto. Aquí cambia también el comité político que es la conducción de nuestro Gobierno”Gabriel Boric
«Debemos escuchar la voz del pueblo y caminar junto al pueblo, y eso le pido al gabinete, humildad, convicción para defender el proceso de cambio, enfrentar las desigualdades y las tareas que tenemos», dijo el presidente al respecto.
De esta forma, en Chile seguirá vigente por el momento la Constitución de 1980, escrita durante la dictadura cívico-militar de Augusto Pinochet (1973-1990), que tuvo una importante reforma en 2005, durante el Gobierno del presidente Ricardo Lagos (2000-2006).
Con este cambio, el presidente espera continuar el diálogo con su sector político y comenzar a negociar con la oposición para poder dar inicio a un nuevo proceso constituyente.