14 enero, 2021
CAE UNO DE LOS ÚLTIMOS 'BASTIONES' DE CAMBIEMOS EN LA GESTIÓN. NO SE DESCARTAN MÁS CAMBIOS EN EL MINISTERIO DE TRABAJO
Finalmente el ministro Claudio Moroni logró desplazar de la SRT a Gustavo Morón. Es uno de los pocos casos de funcionarios macristas que resistieron al cambio de gobierno. En su lugar llega a este puesto clave un hombre de confianza de Alberto Fernández y de la ministra de Justicia Marcela Losardo.
El ministro de Trabajo Claudio Moroni logró luego de un año desplazar a Gustavo Morón de Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) para poner a un hombre cercano a él y al Presidente en ese puesto clave.
Se trata de Enrique Cossio, quien se desempañaba hasta ahora como responsable de la Unidad de Auditoría Interna (UAI) del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Cossio es un hombre de confianza de Alberto Fernández y había sido nombrado en su actual cargo por otro albertista de la primera hora, el titular de la SIGEN y tesorero de Boca Juniors, Carlos Montero.
De acuerdo a los análisis entendidos de la coyuntura política de Balcarce 50, la salida de Morón terminó de confirmarse este miércoles, y antes del fin de semana será publicada en el Boletín Oficial la designación de Cossio en un cargo en el que Alberto Fernández siempre quiso tener gente propia. “La idea es que el lunes ya esté Cossio sentado en su despacho de la SRT”, reconoció una importante fuente a este medio.
Morón, hombre cercano a Guillermo Montenegro, había sido designado en el cargo por Mauricio Macri. Su vínculo con el intendente marplatense se hizo estrecho cuando fue designado asesor del ministerio de Seguridad y Justicia porteño durante la gestión de Montenegro. Siempre se lo señaló como un hombre clave en el proceso de creación de la Policía Metropolitana, hoy policía de la Ciudad. De hecho, uno de sus primeros nombramientos en la SRT fue la contratación como asesora de María José Labat, la ex esposa de Montenegro, según cuenta Data Clave.
Morón es uno de los pocos funcionarios macristas que sobrevivieron en cargos clave. Morón y Moroni empezaron a tener sus primeros roces fuertes en marzo del año pasado. Es que el superintendente se resistía a que el Covid-19 fuera reconocida como enfermedad laboral, algo que se concretó recién más de un mes después de que se dicte el aislamiento obligatorio.
No es la primera vez que Moroni le ‘pica el boleto’ a Morón. Ya había hecho lo mismo cuando el actual ministro de Trabajo asumió en 2007 la dirección general de la ANSES en reemplazo de Sergio Massa. En aquel momento, Morón ocupaba un cargo importante dentro del organismo y Moroni lo desplazó.
Otros roces ocurrieron cuando Morón nombró a Eugenio Begue, ex subsecretario de Trabajo del gobierno bonaerense de María Eugenia Vidal, como miembro de su equipo técnico de trabajo en la SRT. Begue es ex yerno de otro íntimo del Presidente, el embajador en Uruguay Alberto Iribarne. Sin embargo, es otro que dejaría su cargo en los próximas días.
La salida de Morón se da con cierta turbulencia. En las últimas horas, organizó, junto a Begue, una “asamblea de despedida” para comunicarles a los trabajadores de la SRT de su inminente salida.
Parte del ‘clamor’ para su remoción se basó que desde ATE-SRT manifestaron su rechazo a ciertas actitudes de la conducción macrista. Una de ellas es que el superintendente se resistía a que el Covid-19 fuera reconocida como enfermedad laboral, afirman.
Como sea, el cambio está hecho y es un triunfo para Moroni que apunta a que esa silla clave pase a ser ocupada por un hombre de su confianza, de la del Presidente y de la ministra de Justicia, Marcela Losardo. Lo curioso es que se da en un momento en el que en ciertos ámbitos sindicales y empresarios se volvió a hablar de la salida del propio Moroni como ministro de Trabajo. Es más, algunos aseguran que el eventual cambio en la cartera tiene que ver con un “reordenamiento de fuerzas en la coalición de Gobierno”. Desde Casa Rosada y desde Alem 650 desmintieron tajantemente estas versiones, pero en los aciagos circuitos del poder, nunca se sabe.
*DC, NA, LPO