28 julio, 2022
Se realizó el segundo censo aéreo y al 13 de Julio se detectaron 25 ejemplares más que el año pasado en el NE de Chubut.
En la Provincia, varios programas ecientíficos estudian el comportamiento de los cetáceos, y siguen aportando valiosísimos datos de esta especie que convive con los habitantes costeros provinciales. Muchos de ellos se enfocan en el relevamiento aéreo para corroborar la cantidad de ejemplares que cada año se detectan en las costas.
Los vuelos para foto-identificar individuos de ballena franca austral fueron iniciados en 1970 cuando el Dr. Roger Payne comenzó a estudiar la especie en Península Valdés. Desde 1996, este programa lo lleva adelante de manera colaborativa entre el Instituto de Conservación de Ballenas y Ocean Alliance.
Informe del ICB de 2021
En el 2021 también se llevó a cabo el primer censo realizado por el personal del Laboratorio de Mamíferos Marinos del Cesimar – Conicet. La mayor concentración de ballenas se registraron entre el Doradillo, Puerto Pirámides y el Golfo San José, mientras que se contabilizaron nuevamente animales hacia el sur, hasta la desembocadura del río Chubut.
Según el CONICET, el año pasado se contaron 1006 animales. Mientras que este año 2022 la cifra se elevó a 1031 ejemplares en el cual se especifican de la siguiente manera:
«La investigación científica del mundo natural permite desentrañar procesos biológicos y comprender las necesidades de conservación de las especies. Hoy, los cetáceos del mundo viven en un océano cambiante que desafía su futuro y su bienestar», afirman los científicos
El programa de foto identificación se inició en 1970 cuando el Dr. Roger Payne comenzó a estudiar la especie en Península Valdés. Foto Nicolas Lewin.
Se cree que las ballenas francas australes viven en promedio 50 años en estado salvaje, pero la información es escasa y hay ejemplos de especies similares que viven hasta los 100 años de edad.
Hay unas 10.000 ballenas francas australes en el mundo.
Si Puerto Madryn ofrece la posbilidad de ver ballenas desde tierra tanto en el centro de la ciudad como en la Área Protegido «El Doradillo», Puerto Pirámides es la capital del avistaje y de la aventura con estos grandes cetáceos.
Hay seis empresas ampliamente experimentadas y habilitadas por el Estado chubutense que prestan el servicio de acercamiento y avistaje de ballenas. Un paseo en lancha de hora y media donde las ballenas se congregan en torno a las lanchas y permiten una cercanía inigualable con los turistas, todo en un marco de extrema seguridad y gran compromiso con el ecosistema marino.
Se sabe que las ballenas francas australes son atacadas por las gaviotas cocineras de la Patagonia. La gaviotas ocasionan gran cantidad de lastimaduras, dejando enormes heridas en la piel de las ballenas. Además de las heridas, las ballenas pasan gran cantidad de tiempo evitando a las gaviotas lo que significa que dedican menos tiempo a alimentar a los cachorros. Las crías también son vulnerables a las orcas y al tiburón blanco.
La técnica conocida como fotogrametría permite determinar cuan «gordas o flacas» están las ballenas. Foto Nicolas Lewin.
Desde el año 2003, en forma colaborativa con otras instituciones el ICB lleva adelante el Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral. Con la dirección local de la Dra. Marcela Uhart y coordinados en el campo por los Médicos Veterinarios Matías Di Martino y Agustina Donnini, veterinarios y biólogos acuden a cada ballena que muere y llevan a cabo exámenes en busca de cicatrices, heridas y evidencias externas de causa de muerte, toman medidas, muestras de tejidos y órganos internos, además de localización y fotografías. Los resultados se informan periódicamente a las autoridades provinciales de Chubut.
Museum of Natural Sciences de Londres
Uno de los proyecto se realiza en forma colaborativa entre el Dr. Fredrik Christiansen de la Universidad de Aarhus en Dinamarca, la Dra. Marcela Uhart de la Universidad de California, Davis, el Dr. Mariano Sironi del Instituto de Conservación de Ballenas, el Dr. Michael Moore de Woods Hole Oceanographic Institution, y recientemente se sumó la Dra. Ailén Chalcosbky del CESIMAR CCT CENPAT – CONICET como parte de su proyecto de post doctorado. Nicolás Lewin, investigador del ICB, es el piloto principal al mando de los drones.
Para la comunidad de Puerto Madryn, Chubut, el lazo que une a la especie con los habitantes es de comunión y comunidad, cuando año tras año, las ballenas arriban y se mantienen casi seis meses ‘avistando humanos’ muy cerquita de las costas.
Uno de los programas educativas más acertados y valorados dentro de las actividades municipales es precisamente el Programa «Los chicos reciben a las ballenas», una experiencia única, grupal y sumamente impactante para los más pequeños sobre el vínculo y el respeto al medio ambiente y los demás seres vivos.
*ICB/Conicet Cenpat/ECH