29 junio, 2022
EL GOBIERNO BUSCA DESCOMPRIMIR EL CONFLICTO. DESDOBLARON LAS PERICIAS JUDICIALES
El mandatario provincial confirmó que le aceptó la renuncia a la ministra de Educación Florencia Perata tras el escándalo por los más de 70 intoxicados en una escuela de El Maitén, y que está evaluando el reemplazo en la cartera de Educación para anunciarlo en las próximas horas.
Por Trivia Demir*
Tras las idas y vueltas de versiones y ante el desgaste que comenzaba a generar en otros estamentos, el propio gobernador de Chubut oficializó este martes que aceptó la renuncia a Florencia Perata en el cargo de ministra de Educación y que evalúa los nombres de su reemplazo para las próximas horas.
Arcioni expresó: “la educación es uno de los pilares fundamentales de nuestro Gobierno y evaluaré el perfil de funcionario que mejor se adapte a los requerimientos de la comunidad educativa”.
La gravedad de lo sucedido en la Escuela 7.719 de El Maitén con más de 73 personas asistidas por asfixia con monóxido de carbono comenzó a producir ‘efecto político’. La reacción oficial en principio fue lamentable: la entonces ministra de Educación de Chubut consideró frente a los padres que fue una «desgracia con suerte» y el gobernador interpuso una denuncia penal contra ‘otros’. Los gremios, la oposición y los diputados salieron al ruedo, criticando la falta de responsabilización por parte del Ejecutivo, y ya para la noche del lunes la salida d ela ministra sonaba en todos los ámbitos de manera extraoficial.
El descenlace final del desgraciado hecho en El Maitén con más de 70 personas intoxicadas por pérdidas de gas derivó finalmente en la renuncia de Florencia Perata al frente del ministerio de Educación, y el anticipo de la Procuraduría que se suma un fiscal a las causas en curso, y se dividen las investigaciones.
En esa línea el Procurador Jorge Miquelarena asignó al fiscal jefe de la oficina Anticorrupción Omar Rodríguez y compartimentó la investigación, manteniendo el fiscal de Lago Puelo, Carlos Díaz Mayer con la pesquisa por las consecuencias penales que devengan de los problemas de salud ocasionados por la intoxicación masiva en la Escuela. Con esto de alguna manera se descomprimiría la presión social que produjo el caso y que amaga a llegar hasta el ‘hueso’ de un sistema educativo precarizado por donde se lo mire.
Tras lo acontecido el viernes, inmediatamente el gremio docente convocó a un paro de 24 horas a partir de este lunes en repudio de lo sucedido en El Maitén y cuestionando a las autoridades por «desentenderse» del asunto. La Atech ingresó este lunes a Legislatura un pedido para que diputados avancen con la interpelación a la ministra Perata. Además exigieron la renuncia de la totalidad del Gabinete que acompaña a la funcionaria provincial, por no ofrecer respuestas a los reclamos, habilitando el dictado de clases en «condiciones precarias e inadecuadas».
A la par, la CTA pidió a la par la renuncia de la ministra, mientras en Diputados comenzaron a llover los pedidos de informes y sobrevuela una interpelación. Ese es a grandes rasgos el escenario que domina la última semana de junio previa a las vacaciones escolares invernales.
El tema dominó el fin de semana en la opinión pública y hasta ayer, las versiones off de récord del desplazamiento de Perata cobraron fuerza, y finalmente este martes el Ejecutivo confirmó su salida. Para una gran parte de los ciudadanos, el modelo de política de ‘emparches’, sea por la cuestión que sea, (urgencias de pandemia, vaciamiento de caja anterior, connivencia con el empresariado que realiza obras ‘a medida’ del bolsillo, o desinversión histórica) se va terminando, ante las evidencias materiales de desastres cotidianos, sean o no ‘con suerte’, como dijo Perata. De hecho el debate sobre la falta de recursos para los tareas indelegables del estado que son educación, salud y seguridad no es nuevo, sin embargo sigue siendo relativizado por los ‘aspirantes’ al poder de todos los sectores. Sin temor a error se puede afirmar que ningun funcionario en gestión ha presentado un plan concreto sobre lo que debían comandar, por ende no se hace cargo da casi nada de lo que no prometió explícitamente. Un efecto de la ‘contaminación’ pública que -apara decirlo en términos metafóricos coyunturales- genera la política que ‘prende’, ‘calienta’, pero al final ‘quema mal’.
La ministra Florencia Parata, que quedó en el ojo de la tormenta y terminó renunciando, se podría decir que es hasta un emergente de una gestión en retirada que viene poniendole el cuerpo a soluciones de momento, sosteniendo una política salarial restrictiva y administrando la pobreza sectorial con un presupuesto venido a menos año tras año, que fue empujando achiques de todo tipo, incluídos cierre de escuelas rurales y falta de inversión en infraestructura con las consecuencias pertinentes.
Perata había logrado sostener desde 2020 a esta parte un ministerio ‘reactivo’ que contabilizó ya seis ministros de Educación durante el gobierno de Mariano Arcioni, por donde pasaron anteriormente Gustavo Castán, Graciela Cigudosa, Leonardo de Bella; Paulo Cassuti; Andrés Meiszner y finalmente Florencia Perata que se desempeña en el cargo hace dos años, incluso con amagues de renuncia en medio. Esta nueva crisis le anticiparía su salida, algo hasta ‘recomendable’ en términos políticos, considerando la ola de revisionismo que podría darse de ganar la gobernación un sello diferente al actual.
La ministra de Educación, Florencia Perata presentó su dimisión al cargo tras las intoxicaciones de más de 73 personas en una escuela provincial
Es cierto que los años de desinversión en términos de infraestructura viene de arrastre. La constante es que la mayoría de los gobiernos prefiere cortar cintas y mostrar obras nuevas a reparar desperfectos, y no sólo por una cuestión de marketing político, sino además por ‘beneficios’ de derrames, tal como lo demostraron los juicios donde la mayoría de las grandes constructoras provinciales fueron señaladas por acceder a pagar retornos de obras públicas asignadas por montos siderales. Un estigma de mecanismo que más allá de las probetion logradas no se borra de la memoria y el entendimiento colectivos. Juicios donde además, como destacó un memorioso este fin de semana, «no contó con ningun gasista o electricista sentado en el banquillo».
Parte de toda la desinversión de las últimas décadas obviamente las heredó junto con el sillón, el propio Arcioni. Pero a ello se sumaron los años de gestión propia a pura ‘prueba y error’, con un gabinete que viene de rearmados posibles.
Desde hace cuatro años la provincia esta hundida en una crisis económica y social brutal que este año, con el aumento de los ingresos por coparticipación y el incremento de regalías por mayor valor internacional del petróleo, comenzó a dar espacio al Gobierno para mostrar mayor ‘derrame’ desde hace unos meses, pero con llamativa discrecionalidad en las prioridades. Por ejemplo se sostienen grandes anuncios para inversiones deportivas como la vuelta del TC para conformar a los entusiastas fierreros, o se festeja la provisión de césped sintético en canchas de fútbol mientras faltan las más elementables obras de agua, gas y electricidad en institucions públicas de casi toda la provincia.
A la par, el debate salarial no ayuda a los ánimos de seguir ‘atando con alambre’ lo que no funciona. El congelamiento a los ingresos estatales fue votado en 2018 por legisladores que hoy cobran $500.000, siguieron los pagos diferidos, paritarias a la baja y una inflación que impacta sobre el conjunto de las y los trabajadores, que deben además funcionar en estructuras cuya mayoría exponen algún tipo de problema.
Para el gobierno, no se trata de una desaprensión particular, el motivo es privilegiar el pago de la deuda pública provincial por sobre todas las cosas y sostener la gobernabilidad a costa de alianzas y anuncios marketineros. Un estilo de gobierno desde el punto de vista político, pragmático y efectivo, o sea lo que haría cualquier otro gobernador que está a 18 meses de finalizar su mandato y entiende casi imposible remontar en ese breve lapso, años de postergaciones.
Pero para los que quedan, se torna en un verdadero problema. Sobre todo para quienes aspiran asumir la futura conducción en 2023, y para la ciudadanía que ve materializarse el deterioro con amenazas directas sobre hijos o vecinos.
Mientras por años el Gobierno culpó a docentes y auxiliares de “dejar sin clases a los chicos”, ahora es el responsable que esten casi a la intemperie. Escuelas sin agua, sin gas, con paredes rajadas, con aulas abarrotadas, hacinamiento de varias instituciones en un solo edificio, o edificios directamente inexistentes, son la realidad de la educación pública en Chubut. Los reclamos se vendrían sucediendo concretamente y de manera interna en todos los establecimientos, por lo cual el caso del El Maitén no se habría tratado de ninguna ‘desgracia’ excepcional sino más bien potencial.
Así lo expone un informe reciente de LID donde casi un mes antes advertía los numerosos problemas edilicios en las escuelas de Chubut con lujo de detalles.
«La escuela 108 de Lago Puelo comenzó las clases con el anuncio de que en una semana se suspenderían por el inicio de obre de refacción de los baños. En todo el verano no se pudo ejecutar la obra y los niños deberían perder una semana para ello. Finalmente, la obra nunca se realizó. Hace diez días, se informaba que suspendían el comedor de la escuela por falta de partidas».
«En la agrotécnica 717 de Cerro Radal en Lago Puelo se sus pendieron las clases el año pasado por una fuga de gas. Este año se rompió la caldera el 20 de mayo y el 24 se suspendieron las clases por falta de calefacción. Idéntica situación a la 720 de Trelew donde los estudiantes hicieron publica su denuncia en redes».
«La escuela 109 del paraje Entre Ríos de Lago Puelo suspendió las clases este 31 de mayo por falta de agua al no poder garantizar las condiciones de higiene. Allí funciona una sede del Jardín 446 y el ISFDA 814, que en su anexo en al Escuela 223 de El Hoyo tampoco tendrá clases por falta de agua. La Escuela 788, frente a la 109, tampoco tiene agua».
A fines de mayo se conocía un comunicado de Camuzzi donde solicitaba al Municipio de Esquel “reducir el consumo al máximo posible en todas las entidades educativas, públicas y otras dependencias gubernamentales”. Evidentemente, las prioridades las imponen las empresas de servicios privatizadas, y no la decisión política de asegurar el suministro a la población.
En Trevelin se suspendieron las clases en las escuelas 97, 37. 705, 166, 601, 96 y 7724 de Aldea Escolar, 740 EMETA, 7730 EPJA y el instituto 804. Por redes se denunciaba que Camuzzi cortó el gas en las escuelas 37, 705, el instituto 804, CESAC, Escuela Hospitalaria y la 166.
En el Hoyo, el pasado 13 de mayo, Arcioni junto a Perata colocó la piedra fundamental de la escuela 7727. Una docente de la escuela denunciaba que en la escuela 734 donde funciona la escuela actualmente, hay una rajadura estructural con grave peligro para todos. La respuesta de la Delegación 1 fue la colocación de una cinta de chapa para taparla.
Viviana Pitrelli, Secretaria General de ATECH Noroeste viajó a Rawson llevando el reclamo de 37 escuelas relevadas sobre un total de 50 en la región que presentan problemas graves de infraestructura. La respuesta fue que se realizaran nuevas licitaciones y se realizará una visita en unos días.
Lejos de tratarse de una cuestión aislada el gravísimo hecho sucedido con alumnos en El Maitén puede repetirse en otros establecimientos si el Gobierno no asume otro modo de resolución de conflictos y roturas. Hay abtecedentes que así lo predicen.
El año pasado por ejemplo, otro caso de gravedad inusitada expone una reconocida docente, con 31 años de antigüedad y 21 años como directivo, fue desplazada de su cargo de directora de Escuela Nro 39 precisamente por denunciar pérdidas de gas en el establecimiento. Claudia Isabel Aguilar, una docente que ostenta el segundo puntaje entre miles de otras docentes de la Región VI de Chubut, aún espera que la oficina Anticorrupción con nuevas autoridades aborde su desplazamiento producido hace casi un año, precisamente el 8 de julio de 2021 nada menos que por advertir que podría suceder una desgracia como la que terminó pasando en El Maitén.
Personal de OP trabajando en pérdidas de gas en Escuela 39 de Comodoro (sala de Maestros), por cuyas alertas fue desplazada una directora
Sobre este controversial caso que merece todo un abordaje particular sobra documentación y pruebas del modo en que la burocracia estatal y sbre todo la desidia de quienes ostentan el poder directo, tratan de neutralizar los conflictos sean edilicios, de recursos humanos o de gestión de soluciones. De hecho, la memoria descriptiva de este caso que ya está en vías legales habla por sí misma.
De acuerdo al testimonio de Claudia Aguilar a Chubutline, «Después de mí, separaron del cargo a una maestra que continuó con las denuncias por pérdida de gas. Y a un padre le hicieron denuncia por violencia de género. De esta manera silenciaron a toda la escuela», afirmó.
Todos estos casos, con profusa documentación en cada uno de ellos, dejan al descubierto que lo de El Maitén no se trató de un hecho aislado, y que requiere un giro de timón oficial antes que termine en clamor también de juicio político.
Por el momento, el gobierno ‘huyó para adelante’ al decir de la oposición, y presentó una denuncia ‘para que se investigue penalmente’ presuntamente a la empresa que realizó las tareas en El Maitén, donde no había inspección ni habilitación de Camuzzi. Sin embargo tanto Obras Públicas como Educación aparecen seriamente comprometidos como garantes finales de la habilitación de obras y clases.
Finalmente con la renuncia de Perata, el gobierno descomprimiría por lo menos circunstancialmente la situación.
El gremio de la docencia había presentado este unes a primera hora una solicitud a la Cámara de Diputados para que «todos los bloques» intervengan en una interpelación a la ministra de Educación, Florencia Perata. El sector exigía además la dimisión de la funcionaria provincial, junto con la renuncia de la totalidad del Gabinete educativo, en virtud de «todos los reclamos que se cursaron y no tienen respuesta, más que la presión para tener clases en condiciones precarias e inadecuadas», especifica el escrito emitido por ATECH.
Además, el sindicato resolvió una huelga por 24 horas en todos los establecimientos y dependencias del orden escolar del Ministerio de Educación. La notificación se cursó a la cartera educativa y a la Secretaría de Trabajo. La medida de fuerza declarada representa la demanda de cumplimiento de las garantías edilicias que compete al Estado del Chubut proveer, según las normas generales y la Ley I 1660 de Escuelas Dignas y Seguras, reclamo efectuado por esta asociación sindical, ante el Ministerio de Educación, la Legislatura del Chubut y demás organismos pertinentes.
A la par, la diputada del bloque unipersonal Cultura, Educación y Trabajo (CET), Tatiana Goic, también presentó la semana pasada un pedido de interpelación a la ministra de Educación, como consecuencia de la intoxicación.
En El Maitén hubo además una radio abierta y una marcha en la plaza de los Inmigrantes, desde las 13. Solicitaron la compañía de alumnos y profesores, y familias de los estudiantes para que puedan contar su situación. Atech acompañaba la actividad, en defensa de la educación y las escuelas.
Este lunes hubo una radio abierta y una manifestación social en El Maitén en repudio a lo acontecido en la Escuela local con pérdida de gas que terminó en emergencia sanitaria
Por su parte, desde la CTA Autónoma, José Severiche confirmó oficialmente que se solicitó la renuncia de la Ministra de Educación tras lo ocurrido en El Maitén con la intoxicación con monóxido de carbono a más de 70 personas, y en este sentido reclamó que terminen las obras en las escuelas.
Así lo transmitió el referente en Trelew y Rawson de la CTA Autónoma, José Severiche, tras una reunión del gremio con padres y auxiliares tras lo sucedido en El Maitén en declaraciones a medios radiales. Severiche es uno de los sindicalistas críticos a la actual gestión arcionista y fue despedido de Lotería, donde cumplía un rol en el Bingo Municipal de Trelew hasta 2020, precisamente por ‘bancar’ un paro docente y responder al sector de Adrián Maderna.
Desde la CTA Autónoma, José Severiche confirmó el pedido de renuncia d ela ministra de Educación, Florencia Perata
“Llegó el hartazgo por el abandono de Educación a los chicos, profesores, auxiliares y la falta de mantenimiento de las escuelas”, sentenció el dirigente. El dirigente subrayó que “venimos hace casi 3 años denunciando y mandando notas sobre el mal funcionamiento de las escuelas, por falta de un montón de cuestiones”.
Señaló que el pedido de renuncia de Perata “salió de la gente, si uno no está a la altura es consciente y sabe lo que tiene que hacer, dejar a otras persona”.
“La responsabilidad viene de arriba a abajo, la respetabilidad máxima es del Gobernador sigue la ministra, los subsecretario y los delegados zonales. En algún lado falla y se deben replantear hacia adentro y hacer mejores políticas públicas”, sentenció.
Así las cosas, la situación promete no diluirse solo en confrontaciones de marquesinas e ir a fondo. Y no es de descartar que el propio oficialismo aproveche el envión para renovar parte del gabinete con la salida de Perata, reformular un Ministerio complejo y superpoblado, y disciplinar un poco más a los gremios. Además -se supone- de empezar a poner al día la infraestructura de manera urgente y a conciencia.
Por lo pronto la gestión de Mariano Arcioni enfrenta otro ‘nudo gordiano’ y nada menos que vinculado a la Educación, un verdadero conflicto karmático de la política.
En fin. Como decía Paulo Freire «Todo acto educativo es un acto político». Habrá que ver…