7 junio, 2023
El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció este miércoles que los aguinaldos para los salarios brutos de hasta $880 mil quedarán exentos del impuesto a las Ganancias. La medida, estimaron fuentes oficiales, beneficiará a más de medio millón de trabajadores y servirá para apuntalar el consumo de cara al comienzo de la campaña presidencial.
Aguinaldo: no pagarán Impuesto a las Ganancias salarios de hasta $880 mil
La reducción de la presión impositiva sobre los sueldos es una bandera histórica de Massa que, esta vez choca con la necesidad de reducir el déficit fiscal de cara a la renegociación del Acuerdo con el FMI que se llevará a cabo en Washington la semana próxima. Producto de la última suba del mínimo no imponible, Ganancias a mayo ya mostraba una caída interanual del orden del 14% y producto de la exención, el fisco dejará de recibir en torno a $58.000 millones sobre los salarios de junio y julio.
El Proyecto de Decreto aumenta la exención del inciso z del artículo 26 de la Ley de Impuesto a las Ganancias, lo que se traduce en una exención de los aguinaldos para los trabajadores que cobren menos de 10 veces el Salario Mínimo Vital y Móvil, esto es unos 513 mil trabajadores, más de la mitad de los que tributan Ganancias.
La decisión de Massa llega a menos de una semana de que su equipo viaje a cerrar la negociación con el Fondo para conseguir el desembolso por adelantado de USD10.800 millones con los que blindar el bache que dejó la sequía sobre el balance cambiario, que entre el swap con China y los créditos de organismos multilaterales ya fue parcialmente cubierto. Con ese desembolso, la caída del nivel de actividad podría acotarse solamente al agro minimizando la reducción del PBI a solo 2% en 2023.
De hecho, con esta medida el Gobierno persigue sostener el nivel de consumo con un costo fiscal de prácticamente $58.000 millones apuntalando el poder adquisitivo de los salarios más altos. Esto choca con el FMI y sus lineamientos que solo permiten desviaciones de la meta fiscal –hoy incumplida- para amortiguar los impactos del ajuste fiscal sobre la población más vulnerable.