21 marzo, 2022
Las provincias tendrían un saldo levemente positivo en sus cajas gracias al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) según un análisis de la calificadora Fitch. Qué pasará con las transferencias
Las provincias tendrán saldo «neutro» en sus finanzas por el acuerdo de la Nación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), según un reporte de la calificadora de riesgo Fitch Ratings.
La propuesta de reducción de los subsidios y aumento de las tarifas eléctricas se va a trasladar en una mayor recaudación a las provincias a través de la coparticipación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el cobro del Impuesto sobre los Ingresos Brutos. El IVA sumaría $ 46.000 millones e Ingresos Brutos otros $ 21.700 millones, según Fitch.
En relación al revalúo fiscal inmobiliario, las provincias se podrán alzar con $ 4500 millones en 2022 y $ 14.100 millones en 2023 por la coparticipación de Bienes Personales, sin contar posibles beneficios del incremento en los impuestos inmobiliarios propios de cada jurisdicción. El efecto sería de todas formas marginal, debido a su bajo peso en la recaudación de las provincias.
El recorte de los subsidios a la energía también llevaría a una presión de costos a las provincias que las podría obligar a gastar unos $ 26.000 millones más. El riesgo estará en el cumplimiento de la responsabilidad fiscal.
Con todo, el efecto positivo neto del acuerdo con el FMI está estimado en $ 25.700 millones en el caso de las provincias, de acuerdo a los análisis de Fitch.
Las provincias sufrirán una baja de las transferencias discrecionales (no automáticas) como los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), que totalizaron $ 41.000 millones el año pasado. Por esto, y sin tener aprobado todavía el Presupuesto 2022 (que se enviará al Congreso antes del 15 de abril), puede haber un deterioro en la posición financiera y la liquidez.
Otras transferencias corrientes a las provincias ($ 402.600 millones en 2021) no son discrecionales y se derivan de acuerdos, cuya formalización podría demorarse para alcanzar las metas fiscales en base caja.
Si bien el acuerdo no afecta el financiamiento del déficit previsional de las provincias, el financiamiento del Gobierno a la caja de la Anses ($ 58.500 millones el año pasado) podría disminuir en términos reales y ser retrasado también para cumplir los objetivos fiscales pactados con el organismo, de un déficit primario de 2,5% en 2022.