En esta oportunidad la idea es acercar a los consumidores una prenda de buena calidad y diseño a un precio menor en 2 mil puntos de venta de todo el país para impulsar a aquellas personas que se vieron afectadas por la crisis de los últimos años a que puedan acceder a este beneficio.
Este programa fue impulsado por la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI) y la Federación Argentina de la Industria de la Indumentaria y Afines (FAIIA) en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Productivo.
De esta manera las 70 marcas que venden ropa para bebés y niños, adolescentes, mujeres y hombres deberán colocar el precio en la etiqueta y no tendrán que superar en ningún caso el 30% del precio respecto al del invierno pasado y con ello conseguir una relación con la inflación general.
Pero en una investigación realizada por NA se pudo constatar que no todas las marcas incluidas en el programa cumplen con alguno de los ítems requeridos. En este sentido alguno de los locales que están ubicados en centros comerciales o a cielo abierto no poseen la cantidad mínima de 15 prendas con dichas etiquetas.
A su vez no se muestran a simple vista los artículos para que los usuarios puedan consultar o comprarlo. En algunas ocasiones las marcas no indican cuánto costaba antes la prenda y esto provoca la imposibilidad del consumidor para saber si el descuento es real o no.
Otro ejemplo es la falta de comunicación al respecto ya que las prendas no se muestran en la vidriera ni tampoco incorporan algún cartel o anuncio que señale que dicho local integra la acción.
Como suele suceder en casos en los cuales se lanzan programas con descuentos, el consumidor deberá recorrer los locales de las marcas para poder acceder a dicho beneficio o para facilitar el trabajo es mejor consultar con los vendedores que le podrán dar más información sobre la acción que durará todo el otoño y casi por completo el invierno 2022.
Con respecto al tema precios se observó: remeras mangas cortas básicas desde $3.500 hasta tapados o camperas de abrigo que llegan a los $42.000, es decir más que un salario mínimo actual, y lo que preocupa en este sentido es que no se sabe hasta cuánto alcanzará el valor de estos productos en junio, a poco de que finalice el programa.