12 febrero, 2021
Así se titula un documento difundido por la Red de Académicos por el Desarrollo de una Minería Sustentable, en el que se cuestiona la propagación de temores por el desarrollo de la actividad de parte de otros científicos. «Estamos convencidos de que la actividad minera puede constituirse en uno de los pilares de la reconstrucción del entramado productivo y social de Argentina», afirmaron.
«Marie Curie fue una científica y feminista pionera en el estudio de la radioactividad. Sus dos premios Nobel reflejan la magnitud de sus logros, cuyo legado se extiende hasta el día de hoy. Ni los más recalcitrantes prejuicios de la época la hicieron desistir de su compromiso con la ciencia y la técnica, lo que quedó de manifiesto cuando afirmó que «Nada en la vida es para ser temido, es sólo para ser comprendido. Ahora es el momento de entender más, de modo que podamos temer menos». Así comienza el documento difundido hoy por la Red de Académicos por el Desarrollo de una Minería Sustentable, una entidad conformada por profesionales y académicos de universidades e instituciones de todo el país.
El texto en cuestión comienza fustigando el informe de de la Mesa de Coordinación Técnica sobre Zonificación Minera CCT CONICET-CENPAT, sobre el que señala que «son incontables las falacias que dicho documento manifiesta, como el suponer que un puñado de accidentes mineros implica una amenaza de contaminación, tan falaz como lo sería afirmar que el transporte aéreo constituye una amenaza de muerte violenta, sobre la base de considerar accidentes aéreos ocurridos en el pasado».
«Todo indicaría que consideran que la minería sencillamente no debe desarrollarse. Y es llamativo que el CENPAT se oponga a la minería y, al mismo tiempo, desarrolle una labor científica que no sería posible sin minerales. Sin los materiales procedentes de la minería no existirían los espectrómetros, ni los digestores por microondas, ni las estufas, ni las muflas, ni las balanzas, ni los cromatógrafos, ni las centrífugas, ni los microscopios, ni los autoclaves, ni las campanas de extracción, ni los termocicladores, ni los espectrofotómetros, ni las cámaras de cultivo, ni los muestreadores, ni los agitadores, ni las microcentrífugas, ni los fluorómetros, ni las cortadoras de rocas, ni las computadoras, ni las impresoras, ni los teléfonos, ni los GPS, ni los vehículos, ni las agujas utilizadas en la vacunación contra el COVID-19, ni ningún otro de los equipos que, de acuerdo con su sitio web, el CENPAT utiliza cada día para realizar su labor», señala el documento.
Los especialistas continúan interrogando: «¿es la postura del CENPAT representativa de la comunidad científica? La respuesta es un rotundo no, que queda en evidencia al recordar las recientes jornadas participativas para el desarrollo del Plan Estratégico de Desarrollo Minero Argentino, de las que participaron personalmente la Presidenta del CONICET, Ana Franchi, y el Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza. En dicha oportunidad, el Dr. Salvarezza manifestó: «Quiero destacar la iniciativa de mirar a la minería a largo plazo y su articulación contemplando la ciencia, la tecnología y el medio ambiente. Una mirada trasversal que está atravesada por la discusión de la licencia social. Es importante la ciencia en el debate, un compromiso que desde el ministerio asumiremos para que se lleve adelante con la mayor transparencia dejando de lado posiciones extremas».
Palabras de la presidenta del CONICET
Sigue el documento diciendo que: «El potencial de la minería fue reconocido por la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, cuando en su cuarto período de sesiones aprobó la Resolución UNEA/EA.4/Res.19 sobre gobernanza de los recursos minerales. Dicha resolución reconoce la importante contribución de la minería al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la dependencia que las tecnologías limpias con bajas emisiones de carbono tienen respecto de la extracción de metales y minerales», y agrega: «Dejando al descubierto lo inconducente y falto de ética en la consigna de NO es NO, es necesario reconocer el valioso aporte que el sistema científico puede hacer en la discusión acerca de CÓMO puede desarrollarse la actividad. Un valioso aporte en ese sentido fue dado por la Presidenta del CONICET, la Dra. Ana Franchi, durante las jornadas participativas para el desarrollo del Plan Estratégico de Desarrollo Minero, cuando manifestó que «esta pandemia ha puesto de manifiesto la necesidad de trabajar y de enfocar la investigación a los temas y necesidades del país. Ésto se pudo hacer con la pandemia y ha tenido respuestas muy positivas. Creo que hay muchos temas en los que nos podemos enfocar porque tenemos una sólida comunidad científica preparada que, si hay un desafío, lo puede afrontar».
Finalmente concluyen: «Es cierto que la actividad minera supone ciertos riesgos, de la misma forma en que lo suponen otras actividades como la petrolera, la agropecuaria o la industrial pero, lejos del trágico relato que tan fácil se suele viralizar, la minería moderna se efectúa con altos estándares de calidad ambiental, que reducen considerablemente esos riesgos. Desde la Red de Académicos por el Desarrollo de una Minería Sustentable (RAD-MS) defendemos la necesidad de un saludable desarrollo de la actividad minera y de toda su cadena de valor, en el marco del cuidado del ambiente y a través del conocimiento científico-tecnológico. Estamos convencidos de que la actividad minera puede constituirse en uno de los pilares de la reconstrucción del entramado productivo y social de Argentina».
Ver Documento Declaración Red Académicos
*DEM