17 enero, 2022
La Federación Chubutense de Cooperativas advirtió sobre la situación crítica que atraviesa la cuenca del río Chubut. Se habla de una baja histórica. Casi un 75 por ciento menos de caudal que el año pasado. «El cambio climático ya es un hecho» declaran y los «sistemas de captaciones ya no funcionan por la bajante del río».
Se conocieron diferentes datos sobre el caudal del Río Chubut y sobre el Dique Florentino Ameghino. Desde la gerencia del Dique declaran que el aporte del Río al embalse es casi un 75 por ciento menos que el año pasado y que la disminución del agua acumulada en el dique presenta una baja histórica. Se recaban datos desde el año 44 y es la baja más importante. De hecho, la toma de agua de Trelew quedó a unos 10 centímetros de imposibilitarse la potabilización. Así y todo, el nivel de particulado y turbiedad hizo que se suspendiera la misma.
Por su parte, la federación chubutense de cooperativas (FECHCOOP) plantea que esta baja de caudal impacta sobre el servicio de agua potable. Ya que por la bajante se ralentizan los procesos de producción además que eleva considerablemente su costo. Porque los sistemas de captación ya no funcionan. El titular de este organismo además aseguró : “el cambio climático ya es una realidad”.
El río Chubut es el principal curso de agua (ya que su cuenca cubre el 60% de la superficie provincial total).El río es generalmente de poca profundidad y su flujo de agua puede variar de 4 a 50 m³/s.
Este fin de semana en la zona de los Altares, los entendidos daban cuenta que el río está en el mismo nivel que en marzo pasado, o sea la bajante se adelantó dos meses por el menor aporte de lluvias y deshielos.
Recordaron que el promedio de caudal medio mínimo de enero es de 27,46 metros cúbicos por segundo, pero recordaron que Hidroeléctrica Ameghino reveló que el Dique recibió el año pasado un 74 por ciento menos de agua respecto del 2020, lo que indicaría que el promedio diario sería de sólo 3 metros cúbicos diarios por segundo.
La situación el el Dique Ameghino es verdaderamente alarmante. El aporte del río Chubut al embalse del dique fue el peor de la historia de la provincia desde que hay registro (1944) y está erogando muchísima mayor cantidad de lo que está entrando”, remarcó.
Esto es un colapso en breve para todas las localidades que dependen de la potabilización en el Valle. Sobre todo situaciones como la de Puerto Madryn que depende de sistemas de acueductos para transportar el agua más de 80 kilómetros y almacenar en reservas acotadas para una ciudad que ha crecido exponencialmente en habitantes ys obre todo nuevos edificios. Tanto en Trelew como en Madryn no ha habido nuevas inversiones que acompañen la expansión de las ciudades.
En Equel no alcanzan las reservas y comenzaron los cortes programados. La escacez por falta de nevadas se comenzó a sentir dos meses antes de lo previsto
En Esquel zona de cauces de deshielo, la situación no es muy diferente producto de “las temperaturas elevadas y porque nevó menos en invierno”, viene advirtiendo el intendente Sergio Ongarato desde el mes de diciembre pasado. Si bien una de las 2 perforaciones que se hicieron se encuentra funcionando y sumando agua al sistema, “el consumo es elevadísimo en estos dia de calor -sumado al- derroche”, explicó. Por estos días la ciudad está sufirendo cortes programados por zonas, para recuperar reservas y poder sostener la normal provisión semanal.
Este fin de semana el Gobierno anuncio que la Provincia fue seleccionada para un Plan de Acción para la protección y restauración del Sistema Esquel-Percy en el marco del Proyecto “Integrando datos para mejorar la protección y restauración de los ecosistemas de aguas continentales”. Con lo que se buscará ir planificando soluciones para la localidad cordillerano a mediano y largo plazo.
Comodoro por su parte, siendo la ciudada más ‘rica’ en términos de recursos e ingresos, mantiene su histórico problema de provisión del servicio producto de las permanentes roturas de los caños, que recorren cerca de 220 kilómetros transportando el agua desde Sarmiento hasta Caleta Olivia. No sólo faltan obras acorde a una ciudad sumanente expandida, sino que falta mantenimiento para evitar las grandes pérdidas que se producen en su recorrido disminuyendo el caudal de agua a distribuir.
La obra inaugurada en 1999 ha quedado cada vez más obsoleta e insuficiente, y ni qué hablar del viejo acueducto que data de mediados de la década del ’60. Cuando no se rompe el acueducto, bajan las reservas de agua y por uno u otro motivo se multiplican los cortes del suministro.
Comodoro no hace pie con el abastecimiento de agua desde hace meses. Las roturas del acueducto y la sensible provisión de la cuenca del Senguer ponen a una ciudad ‘rica’ al borde de la precariedad constante
En la medida que el acueducto fue quedando viejo se produjeron una serie de combinaciones que llevaron nuevamente al colapso en el abastecimiento del agua potable para la población de la región. Por un lado se produjo un fuerte aumento de la densidad poblacional en las cuatro urbes que abastece, a lo que se debe sumar el creciente incremento del agua para la explotación secundaria del sector petrolero y otras actividades industriales (datos que serán ampliados en la segunda entrega del Informe Especial).
Una incidencia no menos significativa tiene el uso del agua para riego en la zona del valle de Sarmiento, que aunque no se abastece del acueducto, sí utiliza agua de la cuenca acuífera del Río Senguer.
El administrador general del Instituto Provincial del Agua (IPA), Nicolás Cittadini, reconoció puntualmente que la situación del río Chubut es “compleja” por el escaso volumen de agua que transporta, llamó a ser cuidadosos en la utilización de la misma y extendió dicho pedido a la población en general y también a productores y regantes.
Cittadini sostuvo que “es de público conocimiento que se declaró la emergencia hídrica en la provincia en agosto del año pasado” y explicó que la misma se realizó “previendo lo que está sucediendo ahora, porque viene un caudal mucho más bajo que otros años”. Y añadió que “el río viene muy bajo desde la naciente, el problema de fondo es la sequía y la falta de lluvias y nieve del año pasado y se prevé que este será un año similar”.
Ingresa menos agua al embalse del Dique Florentino Ameghino de lo que se eroga para el consumo. Cittadini calificó a la situación del río como “compleja” porque “viene un caudal mucho más bajo que otros años y hay mucha preocupación por el volumen del embalse, donde está ingresando mucha menos agua que la que se necesita erogar para satisfacer la demanda de la producción de nuestro Valle Inferior y de las cooperativas. Está erogando el mínimo e indispensable para garantizar el consumo humano y la producción”.
El aporte del río Chubut al embalse del dique fue el peor de la historia de la provincia desde que hay registro (1944) y está erogando muchísima mayor cantidad de lo que está entrando”, remarcó.
Aclaró que con la Ley de Emergencia Hídrica hay “contemplados 250 millones de pesos para Servicios Públicos, para que hagan obras para garantizar el agua de consumo humano. Y a nosotros nos toca otra parte igual con lo que ya licitamos perforaciones para los productores y compuertas con aforo, que se abre la licitación a fin de enero”.
Sobre la situación también grave en la zona sur de la provincia, Cittadini informó que “ya está en proceso la licitación la obra de la presa en la naciente del Senguer, allí se hará una presa para regular caudales para cuando vengan los deshielos grandes, guardar el agua en el lago para cuando más se necesita y utiliza en el consumo”.
Hoy “el río Senguer lleva más caudal pero es comparable al río Chubut, ingresa mucho menos agua al lago que la que necesitan para abastecerse y la que se evapora. El problema del Lago Muster es que tiene una tasa muy alta de evaporación, se evapora por día más de lo que ingresa por el Senguer”.
Por su parte, Petrakosky, presidente de la Federación Chubutense de Cooperativas (Fechcoop y titular de la Cooperativa Eléctrica de Trelew, apuntó contra la Compañía de Riego, al afirmar que «es preocupante el hecho de que en este momento hay más agua en los canales de riego que en el cauce del río. La Compañía de Riego se está chupando el agua del río Chubut, literalmente».
Precisó que «Hidroeléctrica Ameghino está erogando 30 m3 por segundo y las Cooperativas necesitan sólo 1,5 m3 por segundo (un 5% del total de la erogación) para la captación de agua a fin de potabilizarla y distribuirla. Lo que recibimos las Cooperativas en el último tramo del río es lo que devuelven los canales. Estamos potabilizando con las migajas que nos devuelve la Compañía de Riego. Es decir que la Compañía está consumiendo alrededor de 2.300 millones de litros por día».
«Es necesario que se asegure un caudal ecológico de 6/8 m3 por segundo para que todo funcione con normalidad. La verdad que es una vergüenza lo que está pasando», indicó, detallando que «antes de ayer en la captación de agua de la Cooperativa de Trelew estábamos con 50 cm de nivel aproximadamente, mientras que ayer a la mañana disminuyó a 19 cm».
Al develar la causa de esa baja en el caudal, dijo que «lo que pasó es que la noche anterior la Compañía de Riego abrió sus compuertas y el agua del río fue a los canales, mientras que las Cooperativas, en sus áreas de captación recibieron el mínimo caudal». La administradora de riego es uno d elos organismos que el pasado año se ‘normalizó’ y fue una de las gestiones que el Gobierno ponderó como logro propio.
En este caso, el titular del IPA afirmó que «la Compañía de Riego tiene que dejar de hacer un uso desmedido del agua del río Chubut, porque siguen regando en todo el valle con sistema de inundación», y explicó que «ellos necesitan una erogación de 30 m3 para poder llenar los canales y llegar a todas las chacras, pero parece que no es suficiente para ellos. Es una vergüenza, porque teniendo en cuenta la situación que estamos atravesando, deberían trabajar en el cambio del método de riego. En la zona del Valle se pueden observar chacras totalmente inundadas, incluso gran cantidad de ellas son improductivas».
Bajante extrema en Los Altares. Una de las advertencias científicas es la diferencia que se produce en cada tramo del río, con evaporaciones importantes producto del largo trayecto en zonas áridas y de altísimas temperaturas.
La situación de desmanejo hídrico en Chubut no viene de ahora ni se produce en esta ola de calor y sequía.
Ya el 7 de agosto decían los diarios “Impactante baja del río en la zona de El Elsa. La imagen que presentó el río Chubut en la zona de El Elsa, cerca de su desembocadura en Puerto Rawson”.
El 16 de octubre “Preocupa la baja en el caudal del río Chubut. La Cooperativa Eléctrica de Trelew expresó su preocupación por la reducción del caudal del río Chubut registrada en los últimos días, situación que podría generar a futuro dificultades para la potabilización, con la consecuente reducción del nivel de las reservas que sostienen el suministro de agua potable a la ciudad”, era la noticia del día.
Y agregaba la nota “Al respecto desde las cooperativas de servicios públicos se formuló un reclamo ante la Compañía de Riego y el IPA, en virtud de la desmedida utilización del recurso río arriba, en detrimento de la posibilidad de potabilizar con normalidad”.
Ambientalistas locales expresaron que «Mientras el gobierno y la oposición agitan la Renta Hídrica como una falsa respuesta a la crisis económica, resulta que nos quedamos sin agua. No se puede seguir pensando los problemas ambientales desde la lógica de negocios que plantea el capitalismo, es necesario afirmar un camino de ruptura con este sistema que privilegiando las ganancias empresarias y productivas nos conduce al abismo como humanidad.»
A la par, existen numerosos estudios científicos y técnicos que advierten del sensible sistema de provisión de agua que posee la provincia de Chubut, y la necesidad de una administración concienzuda y a la altura de las responsabilidades públicas. Sin embargo la mayoría pasa a engrosas los anales de la ciencia y las publicaciones de rigor, bien lejos de ser tenida en cuenta por quienes ejecutan las políticas públicas. Ejemplo de ello es el
Análisis de Factibilidad de Fondo Agua de la Cuenca del Río Chubut que data de Mayo de 2020, respaldado por la Alianza latinoamericana de Fondos de Agua, la Universidad San Juan Bosco, el CONICET, el INTA, el BID y un otras organizaciones ambientales y científicas.
(Ver informe completo Análisis de Factibilidad de Fondo de Agua Cuenca del Río Chubut )
Por ahora, la gestión pública apela a la responsabilidad social para evitar derroches y recuperar reservas, mientras evalua medidas de mitigación en los diferentes ecosistemas hídricos de la provincia y corre detrás del problema.
